Argentina pidió este jueves a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que adopte medidas cautelares ante el caso de Nahuel Gallo, el gendarme argentino detenido en Venezuela desde el pasado 8 de diciembre.
"La República Argentina solicitó hoy a la CIDH medidas cautelares en favor de Nahuel Agustín Gallo, detenido ilegalmente en la República Bolivariana de Venezuela, en un acto que constituye una grave violación de derechos humanos", expresó la Cancillería argentina en un comunicado.
La presentación del Gobierno de Javier Milei a la CIDH resalta la "arbitrariedad" de la detención de Gallo y pide "medidas urgentes para garantizar su protección, ordenar su liberación inmediata y asegurar su retorno seguro a Argentina".
"Basada en el artículo 25 del Reglamento de la CIDH, la solicitud enfatiza la urgencia del caso y el riesgo inminente para la vida e integridad de Gallo", indica el comunicado.
El Gobierno argentino dijo que espera que la CIDH "resuelva con rapidez y exija su cumplimiento al Estado venezolano".
"Los derechos humanos y la democracia deben ser respetados y protegidos por todos", añade el comunicado.
Este mismo jueves, Argentina también presentó una denuncia ante la Corte Penal Internacional por la detención del gendarme.
Gallo, miembro de la Gendarmería Nacional Argentina (policía de frontera), ingresó el 8 de diciembre al territorio de Venezuela desde Colombia, a través de un paso fronterizo terrestre, y cruzó el Puente Internacional Francisco de Paula Santander para dirigirse al estado venezolano de Táchira (oeste), con el propósito de visitar a su pareja, con quien tiene un hijo.
El pasado domingo en declaraciones al diario argentino Clarín, el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, indicó que Gallo permanece detenido en Caracas imputado por los delitos de conspiración, terrorismo, financiación al terrorismo y asociación ilícita por estar "involucrado en la planificación y ejecución de graves delitos contra la seguridad" de Venezuela.
El fiscal venezolano aseveró que "Gallo se encuentra bien de salud" y que "su integridad ha sido respetada como obligan la ley y la Constitución".
Según señaló Saab, el gendarme argentino "fue detenido al haber intentado ingresar irregularmente desde Colombia" y hay "información de inteligencia que lo vincula a la planificación de acciones desestabilizadoras y terroristas en territorio venezolano".
Tras esas declaraciones, el canciller argentino, Gerardo Werthein, aseveró que el caso de Gallo "es una prueba contundente de las graves violaciones al derecho internacional y a los derechos humanos fundamentales" en Venezuela.
Buenos Aires / EFE