El pasado domingo 15 de agosto, la crisis política en Afganistán se intensificó después de que El Talibán declarara la victoria en ese país del Medio Oriente, cuyo presidente, Ashraf Ghani, huyó al ver colapsado su gobierno cuando Estados Unidos (EE.UU.) comenzó el retiro de sus tropas.
Para los afganos, el regreso de los militantes radicales, después de 20 años de invasión por parte del gobierno norteamericano, supone una carrera contrarreloj ante la incertidumbre por lo que pasará y las consecuencias que generará una administración islamita.
Tras la toma de Kabul por parte del Talibán, el mundo ha sido testigo de cómo miles de ciudadanos buscan huir de la nación asiática, por temor a un régimen estricto que, a juicio de organizaciones internacionales, pone en peligro los derechos humanos (DD.HH.).
La pérdida de libertades es uno de los miedos que asaltan a los afganos, en especial a las mujeres, pues al extender su influencia y el control de más de 90% de Afganistán en 1998, el grupo impuso una radical visión del islam con unas cuantas prohibiciones.
“Después de luchar sin descanso, durante dos décadas, para conseguir que se reconozcan sus derechos fundamentales, las mujeres afganas se enfrentan a la posibilidad real de ver cómo se comercia con estos logros. El camino recorrido para realizar los derechos de las mujeres no puede desandarse en este proceso de paz; los derechos humanos de todas las personas afganas, y en particular de las mujeres y niñas, deben estar en el centro de cualquier acuerdo”, afirma Samira Hamidi, responsable de campañas de Amnistía Internacional sobre Afganistán.
Los talibanes, o "estudiantes" en la lengua pastún, se han caracterizado por prohibir el cine, el teatro, la televisión y la asistencia a las escuelas por parte de las niñas mayores de 10 años. Asimismo, por introducir o apoyar castigos como ejecuciones públicas, lapidaciones y latigazos.
Salida forzada
De acuerdo con el portal France24, los intentos de la población por salir de Afganistán se han multiplicado, pese a que, en su regreso, el régimen Talibán ha prometido una “aministía”. Sin embargo, quienes han trabajado o prestado su colaboración a EE.UU. u otras naciones occidentales temen ser castigados.
Luego de que la capital de Afganistán, Kabul, fuera tomada por el grupo islamita, miles de personas se apostaron en el aeropuerto de la ciudad para escapar. A través de las redes sociales, videos mostraban a hombres aferrados a los aviones mientras despegaban. Las imágenes de aeronaves militares repletas de afganos también se viralizaron.
Según explica la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), alrededor del 80% de casi un cuarto de millón de afganos que se vieron obligados a huir desde finales de mayo de 2021, son mujeres y niños. No obstante, el organismo apunta que la crisis de desplazamiento en Afganistán se vive desde hace cuatro décadas.
Por su parte, cifras de Acnur indican que más de 550.000 afganos han sido desplazados internos desde principios de 2021 y un total de 72.375 refugiados afganos están alojados en Afganistán, mientras que 2.215.445 se encuentran en Irán y Pakistán.
Entrevistada por Robyn Curnow de CNN, la representante de Acnur en ese país, Caroline Van Buren, afirmó que entre 20.000 y 30.000 personas salían del país semanalmente.
Citada por el portal web de la agencia de la ONU, Van Buren, indicó que el organismo está solicitando a los diversos países del mundo que mantengan sus fronteras abiertas para que las personas que quieran salir de Afganistán para buscar protección internacional, puedan hacerlo.
“Se trata, entonces, de tres niveles: primero, mantener las fronteras abiertas; segundo, brindar asistencia vital de emergencia; y tercero, reconstruir la infraestructura y las instalaciones dañadas para que las personas puedan volver a su hogar”, acotó.
Apoyo mundial
La toma del poder por parte de los talibanes no ha sido vista con buenos ojos por la comunidad internacional, debido a su historia de opresión contra mujeres y niñas, y contra cualquier individuo que incumpliera sus leyes extremistas.
“Muchas personas temen ahora las represalias de los talibanes contra quienes colaboran con el gobierno o con la comunidad internacional, contra quienes han trabajado para promover los derechos humanos y la justicia, o contra quienes, sencillamente, consideran que su estilo de vida y sus opiniones son contrarios a la ideología talibán”, dijo la Alta Comisionada para los DD.HH. Michele Bachelet, durante una sesión especial dedicada a Afganistán.
Una publicación de la BBC Mundo destaca que varias naciones ya se han comprometido a recibir a cierto número de refugiados, particularmente aquellos civiles que ayudaron a las fuerzas de EE.UU. y la coalición de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) durante 20 años de operativos militares.
Así también, países vecinos de Afganistán han manifestado la necesidad de aplicar estrategias para contener una migración irregular en sus territorios. De acuerdo con las Acnur, en el año 2020, Pakistán (1.450.000), Irán (780.000), Alemania (181.100), Turquía (129.300) y Austria (46.600), fueron los cinco países con mayor cantidad de refugiados y solicitantes de asilo afganos.
Pero en Latinoamérica, del otro lado del continente, varios países se mostrado solidarios con los ciudadanos afganos y han confirmado que los recibirán. Según reseña El Universo de Ecuador, algunas naciones de la región comienzan a procesar solicitudes de refugios, dándoles prioridad a las mujeres y niñas.
Chile, Costa Rica y México fueron de los primeros en manifestar su interés en ayudar a los ciudadanos que huyen del Talibán, mientras que otras siguen estudiando alternativas para actuar ante lo que consideran una crisis humanitaria.
“Hemos iniciado el procesamiento de las primeras solicitudes de refugio de ciudadan@s afgan@s, especialmente de mujeres y niñas que lo han así solicitado”, publicó el canciller mexicano Marcelo Ebrard a través de su cuenta de Twitter.
El portal de El Tiempo de Colombia informó que para el 31 de agosto de 2021 aún no había fecha confirmada para la llegada de afganos a su país, el cual pisarán temporalmente para luego seguir su tránsito hacia Estados Unidos (EE.UU.), dijo el director de Migración Colombia, Juan Francisco Espinosa.
El gobierno del presidente Joe Biden ha informado que, desde el 14 de agosto, más de 100 mil personas han sido evacuadas de Afganistán. Ha dicho que se está llegando a un acuerdo con algunos de sus estados y otros países para la acogida temporal de sus colaboradores afganos y familiares a través del programa "Operación Refugio a Aliados".
En tanto esto sucede, algunas naciones albergan transitoriamente a afganos que piden asilo mientras les tramitan sus visas.
Pronunciamiento
La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) emitió un aviso de no retorno para Afganistán, este lunes. Es decir, pidió "una prohibición para los retornos forzosos de ciudadanos afganos, incluidos los solicitantes de asilo cuyas solicitudes han sido rechazadas". “Los Estados tienen la responsabilidad legal y moral de permitir que quienes huyen de Afganistán busquen seguridad y no devolver a los refugiados por la fuerza”, dijo la portavoz del Acnur, Shabia Mantoo, en una conferencia de prensa.
Puerto La Cruz / Redacción Mundo