Un exsoldado británico irá a juicio en relación con la muerte de dos activistas por los derechos civiles en Irlanda del Norte hace 47 años, parte de un incidente conocido como el Domingo Sangriento, dijeron fiscales el jueves.
El acusado, identificado como soldado “F”, era uno de los efectivos del regimiento de paracaidistas enviado a reprimir la protesta en Londonderry el 30 de enero de 1972. Se le juzgará por el asesinato de James Wray y William McKinney y el intento de asesinato de Joseph Friel, Michael Quinn, Joe Mahon y Patrick O'Donnell.
Otros 16 soldados investigados no irán a juicio por la represión, que tuvo lugar durante el momento más álgido de la época de agitación en Irlanda del Norte conocida como los Problemas.
La investigación, que tomó 10 años, concluyó que los soldados mataron a 13 manifestantes desarmados que protestaban la detención de presuntos nacionalistas irlandeses por las autoridades británicas. Pero los resultados de la pesquisa que concluyó en 2010 no pueden ser utilizados judicialmente, y los cargos presentados el jueves derivan de otra investigación policial del incidente.
“Quiero declarar claramente que donde se ha tomado una decisión de no demandar, esto de ninguna manera minimiza las conclusiones de la Investigación del Domingo Sangriento, de que los muertos o heridos no representaban una amenaza para los soldados británicos”, dijo Stephen Herron, director del ministerio público para Irlanda del Norte, al anunciar los cargos. “Reconocemos la profunda desilusión que sienten muchas de las personas con las que nos reunimos hoy”.
Las familias de las víctimas reclaman justicia, en tanto los partidarios de los soldados dicen que es injusto juzgarlos por hechos sucedidos hace décadas.
Londres / AP
