El abogado José Antonio Marín invitó a los "creadores de contenido" a tomar conciencia sobre la labor que ejercen, pues, aunque en Venezuela actualmente no hay una ley que los regule, el mal manejo de algún material puede desencadenar consecuencias legales en su contra.
Marín citó como ejemplo un caso reciente en el que una persona que trabaja con las redes sociales hizo pública una denuncia contra un establecimiento en Puerto La Cruz. En un video el individuo afirmaba que compró una bebida caliente y en la misma encontró restos de insectos, a la vez que mostró su inconformidad con la forma en la que el personal encargado manejó la situación.
El jurista recordó que eso ocurrió el viernes 29 de agosto, pero este martes 2 de septiembre la misma persona difundió un nuevo material audiovisual en el que aseguró que todo fue un mal entendido y que, luego de estudiar a fondo la situación, reconoció que actuó de mala manera. Marín enfatizó que en ese tipo de prácticas se incurre en una serie de delitos que pueden ser utilizadas por la víctima para ir ante la justicia.
Sentar precedentes
José Antonio Marín indicó que el caso antes descrito, que involucra a la tienda ChurroManía de Puerto La Cruz, debe servir para sentar un precedente y que los llamados "influencers" comiencen a tomar con seriedad lo que hacen y el alcance que puede tener, tanto para bien como para mal la información que difunden.
"Creemos que con el uso indebido de las redes sociales se expone indebidamente tanto a personas como a comercios, causando daños patrimoniales", acotó.
Marín también expresó que emular lo que eran las actividades propias de los periodistas (que a su juicio es lo que hacen los "creadores de contenido"), debe pasar igualmente por un filtro de contrastar la información que se publica.
Resaltó que el llamado no es para promover la censura, si no para que las personas que se dedican a trabajar en redes sociales estén claros de las responsabilidades civiles y penales que conlleva una difusión indebida.
El jurista, asesor legal de ChurroManía, detalló que en episodios como el ya mencionado se incurre en delitos como difamación, revelación indebida de información, entre otros, lo que abre el escenario para que el afectado pueda solicitar la intervención del sistema judicial.
Barcelona / Javier A. Guaipo