A las 3:00 de la madrugada de este domingo, el bachiller Edimberth José Rojas Rondón, de 20 años, murió al recibir un tiro en la cabeza, presuntamente de manos de un adolescente, durante una fiesta callejera que se realizaba en el sector Villas Olímpicas de Barcelona.
Al parecer, el joven se fue a los golpes con unos menores de edad y uno de ellos sacó un arma y le disparó.
A su madre, Cristina Rojas, le avisaron que a su hijo lo habían herido. Ella se trasladó al sitio y lo encontró aún con vida. Le aplicó los primeros auxilios y se lo llevó al hospital Luis Razetti de la capital anzoatiguense, donde falleció cuando era atendido por los médicos.
Dijo que el muchacho era el segundo de cinco hermanos y estaba estudiando bachillerato, pero se retiró para emigrar a Colombia con un tío. Comentó que ella le pidió que no asistiera a la fiesta, pero él no escuchó sus ruegos.
Aseguró que su hijo era un joven sano, tranquilo y no se metía con nadie.
En la muerte de Rojas señalan a seis adolescentes que andaban bajos los efectos de las drogas y el alcohol. Este grupo está plenamente identificado por la policía científica.
Barcelona / Eleida Briceño