Las cenizas de 245 migrantes mexicanos que murieron por COVID-19 en Nueva York han regresado a su país de origen.
Un avión de la Fuerza Aérea Mexicana que transportaba los restos llegó cerca de la medianoche del sábado en lo que el Departamento de Liberaciones Extranjeras llamó un esfuerzo "sin precedentes".
Las urnas fueron tomadas del avión y colocadas en una mesa adornada con flores blancas para una breve ceremonia.
"Es la forma en que México expresa su gratitud por tanto que nuestros migrantes han contribuido desde el extranjero y, por supuesto, además de dar consuelo a sus familias, quienes pueden darles un último adiós en sus tierras", dijo Roberto Velasco, de Relaciones Exteriores.
El cardenal católico romano Timothy Dolan, arzobispo de Nueva York, celebró una misa por las víctimas del coronavirus el sábado en la Catedral de San Patricio, bendiciendo las cenizas.
El gobierno dice que más de 1,500 migrantes mexicanos han muerto de COVID-19 en los Estados Unidos, aproximadamente la mitad de ellos en Nueva York.
Ciudad de México / AP
