En la Unidad Educativa “Maximiliano Córdova” de playa Colorada, en la parroquia Gran Mariscal del municipio Sucre, al oeste de la entidad sucrense, los problemas se han venido acumulando con los años y los daños continuos que producen cada temporada de lluvias.
La subdirectora de la institución, Tibisay Albornoz, explicó que las filtraciones se comen la estructura con cada periodo de precipitaciones. “De mayo a septiembre la escuela presenta brotes de aguas en la segunda y tercera planta”.
Además, se desbordan los pozos sépticos y hay un vacío cerca del auditorio de la escuela, que pese al esfuerzo de las autoridades no ha podido ser localizado para corregirlo.
Albornoz explicó que en el plantel sobreviven gracias a la autogestión del personal y los padres y representantes.
Atienden una matrícula de 251 niños, desde educación inicial hasta sexto grado, con una plantilla de 47 personas entre docentes, cocineras, administrativos y obreros.
Tras el deslave que ocurrió en la zona hace unos 15 años, de Caracas se trasladó un equipo de expertos que hizo un estudio geológico, en el cual se determinó que el plantel en sus condiciones y ubicación actual, no está apto para funcionar.
“Hoy le hago un llamado a las autoridades, antes de que nos vuelva a llegar l periodo de lluvias en este año, vengan a la escuela”.
Hay daños en las paredes y filtraciones en la cocina, a través de la platabanda. “Corremos riesgo en una escuela así. No la podemos parar, decirles a los niños que no vengan, la comunidad no tiene un sitio donde podamos trabajar. La solución aquí la tiene el Estado”.
La docente precisó que requieren una escuela nueva, aunque ellos con mucho corazón se mantengan en el sitio. “El personal docente de esta institución es muy dado a las tareas escolares y a mantenerse en el plantel”.
Pedro Ramírez, obrero de la institución, ratificó el llamamiento a las autoridades, para que atiendan el problema que presentan, con anegaciones continuas, filtraciones y daños a paredes y techos.
“El riesgo que corremos es que la quebrada nos lleve a la playa. Se cansan de venir, toman fotos y nos quedamos esperando que vengan a arreglar esto”.
Sucre / Cecilia Lárez
