Medio centenar de agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) y la Guardia Nacional (GN) dispersaron a unos 700 migrantes de Centro y Suramérica, entre los cuales había venezolanos, que pretendían salir en caravana este domingo desde la ciudad de Tapachula, fronteriza con Guatemala.
Según EFE, a las 06.00 horas (12.00 GMT) los ciudadanos estaban congregándose en el parque central de Tapachula cuando los agentes arribaron para dispersar a los extranjeros.
Los foráneos al ver la presencia de los agentes de migración y de la Guardia Nacional salieron corriendo con sus hijos y sus mochilas al hombro por las calles aledañas para esconderse de los uniformados.
Una decena de vehículos de migración y cinco de la Guardia Nacional fueron colocados por los agentes a la orilla del parque central. Mientras tanto, algunos agentes se mantuvieron arriba de los automóviles observando los recorridos de otros que dieron la vuelta por toda la plaza principal.
El objetivo, dijo uno de los agentes a EFE, era esparcir a los cientos de migrantes que acampaban en diversos puntos, pero no detenerlos.
Tras el operativo, los afectados señalaron que si las autoridades mexicanas no los quieren en Tapachula, ello solo piden que los dejen seguir avanzando por el país, ya que ese es su principal objetivo.
Ciudad de México / Redacción Web