La desidia oficial y la falta de conciencia de los pobladores pareciera reinaR en la capital del estado Anzoátegui.
Caminar por las calles de Barcelona se ha convertido en un acto de acrobacia, debido a la acumulación de desechos sólidos, no sólo en las aceras, sino también en al menos uno de los canales de circulación de las vías. Así lo constató el equipo de El Tiempo durante un recorrido por diferentes sectores de la ciudad.
La avenida Bermúdez, justo detrás de la Inspectoría del Trabajo; las calles El Amor del sector Buenos Aires, Las Flores de El Espejo I, los alrededores de la plaza San Felipe y la autopista José Antonio Anzoátegui, justo a la altura de La Ponderosa, Mesones, La Orquídea y El Viñedo son algunos de los lugares donde se observa mayor cantidad de basura.
Según la vecina María Pérez, los mismos trabajadores del ayuntamiento convirtieron la avenida Bermúdez en un vertedero, pues allí botan los escombros que sacan de las reparaciones que hacen en la zona.
Mientras que en la zona sur de Barcelona, habitantes de La Ponderosa comentaron que diariamente tienen que sacar sus desechos a la autopista porque los obreros de la alcaldía tienen más de tres años sin recorrer esas calles.
“Además, ellos no tienen días fijos para la recolección en la entrada. La mayoría de las veces se forman torres de basura y los vecinos terminan quemándolas. La contaminación empora cuando llueve, porque el agua arrastra todo”, manifestó Rosario Hurtado.
Barcelona /Elisa Gómez
