Will Smith ganó la noche del domingo el premio Óscar al mejor actor por Rey Richard, pero la alegría quedó ensombrecida por su inesperada reacción violenta a un chiste de Chris Rock que le hizo levantarse de su asiento y darle una bofetada en directo en el escenario del Dolby Theater de Los Ángeles, California, Estados Unidos, informó la agencia de noticias EFE.
Rock bromeó sobre la cabeza rapada de la mujer de Smith, Jada Pinkett-Smith -quien ha reconocido públicamente que sufre alopecia- al compararla con la Teniente O’Neil de G. I. Jane, la película dirigida por Ridley Scott.
Smith se levantó de su asiento y se dirigió a Rock para pegarle una bofetada que éste trató de esquivar ante un público enmudecido. Al volver a su asiento el actor continuó gritando: "Mantén el nombre de mi esposa fuera de tu boca".
Tras el extraño incidente, Rock, aún desde el escenario, siguió bromeando con resolverlo en la fiesta al finalizar posterior a la ceremonia, sin que los asistentes ni la prensa acreditada tuvieran claro aún si lo que habían visto era real o simulado.
Luego de alzar su estatuilla por interpretar a Richard Williams en Rey Richard, Smith justificó su acción violenta, al afirmar que nunca dejará que le hagan daño a su familia.
"Richard Williams era un valiente defensor de su familia (...) En este momento de mi vida, estoy superado por lo que Dios me invita a ser y a hacer en el mundo (...) En este negocio a veces tienes que soportar que la gente te insulte y te falte el respeto y tú has de sonreír, y decir que todo está bien, pero esta noche no es así", comentó Smith citado por el mencionado servicio de noticias.
"En el momento más alto es cuando el demonio va a por ti (...) La vida imita el arte y me volví un padre loco, como mi personaje. Espero que la Academia (organizadora de los Óscar) me invite de nuevo".
Los Ángeles / Redacción Web
