Pese a que Anzoátegui sumó 102 casos positivos de Covid-19 con un nuevo reporte de 22 afectados hecho por el Gobierno nacional, la noche del martes, la mayoría de los transportistas privados de la zona metropolitana continúan con el incumplimiento del distanciamiento social dentro de las unidades, aun cuando se trata de una de las principales medidas de prevención.
Tras realizar un recorrido por algunas rutas internas de Barcelona y Puerto La Cruz; como también por las avenidas que comunican a las dos ciudades, el equipo de El Tiempo constató que los trabajadores del volante sólo exigen el uso adecuado del tapaboca.
Las populares frases “espalda con espalda” o “avancen al final del pasillo” se siguen escuchando dentro de los autobuses, con pocos reclamos de los usuarios.
Y es que según el ama de casa Carolina Velásquez, quien abordó una unidad en la avenida Caracas de Barcelona para trasladarse hasta la zona porteña, más puede la necesidad.
“Estoy consciente de que no deberíamos estar amorochados, pero son pocos los autobuses que están circulando por el problema de la gasolina. No hay opción de esperar uno vacío”.
Desacato
De esta manera, la mayoría de los transportistas incumplen con la Gaceta Oficial publicada el 1° de junio, que establece, entre otras cosas, que los pasajeros de las unidades de transporte terrestre y sistema masivo deben mantener un puesto de por medio. El uso de puestos continuos sólo aplica para familiares que convivan en la misma casa.
“Los autobuseros hacen lo que les da la gana porque los policías no los obligan a cumplir la ley. Al principio de la cuarentena se veía que en las alcabalas les llamaban la atención y los choferes hacían caso, pero ahora nadie les dice nada”, expresó el obrero Carlos Marín.
Elisa Gómez / Barcelona