Ya desde hace 14 días el ascensor 3 del hospital Universitario Dr. Luis Razetti de Barcelona no funciona, lo cual obliga a los trabajadores del nosocomio a movilizar, tanto a pacientes operatorios como cadáveres, por las escaleras.
Los representantes del Movimiento de Trabajadores de la Salud, Rodolfo Andrade, Junior Murillo y Edisson Hernández aseguraron que hasta el momento ninguna figura gubernamental se ha presentado en el lugar para hacer una inspección de las fallas y gestionar soluciones.
Andrade contó que hace varios días, mientras trasladaba un cadáver hacia la morgue, se resbaló y casi cae por las escaleras. “Por suerte solo fue un traspié y no ocurrió nada grave. Mis compañeros se percataron de la situación y sujetaron el cuerpo en ese instante”, dijo.
Junior Murillo señaló que, debido al esfuerzo que hacen diariamente, los camilleros han manifestado que presentan dolores en las articulaciones, rodillas y espalda.
“Lo que más nos preocupa es que los pacientes recién operados estén sufriendo las consecuencias de la indolencia del gobierno. Tenemos días diciendo la gravedad del asunto pero parece que nadie ha escuchado”, expresó.
La oscuridad en las escaleras es otro de los factores que pone en riesgo a los trabajadores a la hora de hacer los traslados.
Respaldo
La especialista en Derecho Laboral, Dulce Fuenmayor, miembro de la Alianza Bravo Pueblo Anzoátegui (ABP), expresó que el gobernador Antonio Barreto Sira, como responsable legal del principal recinto hospitalario de Anzoátegui, está obligado a garantizar su buen funcionamiento.
“El gobierno debe recordar que los trabajadores están protegidos por la ley y, de creerlo conveniente, pueden separarse de su puesto a fin de resguardar su vida. La Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras son claras en cuanto al asunto”, señaló.
Barcelona / Milena Pérez