Michelle Ferrera, comerciante que labora en el municipio Sotillo y habló en nombre de un grupo de sus colegas, denunció que desde hace dos meses los funcionarios públicos encargados de tramitar permisos para locales de la zona norte de Anzoátegui se dedicaron a retrasar el proceso, algo que impide que los miembros del sector terciario puedan cumplir sus labores con normalidad en el estado.