El Sindicato de Trabajadores de la Salud (Sintrasalud) denunció que 50% de los módulos de Barrio Adentro en Anzoátegui han dejado de brindar sus servicios como consecuencia del déficit de medicamentos y de equipos de primeros auxilios.
Estas carencias se habrían convertido en el motivo por el cual el personal abandona sus puestos, pues al parecer sufren agresiones a manos de familiares de pacientes por no poder atender emergencias por esa falta de dotación.
Giovanni Yaguaracuto, secretario general del gremio, detalló que en la zona norte hay alrededor de 30 consultorios populares creados por el gobierno nacional y la mitad han dejado de prestar servicios por el daño de equipos tan básicos de atención, como tensiómetros, nebulizadores, termómetros y electrocardiógrafos. Tampoco reciben medicinas para asistir a los enfermos.
Aseguró que algunos de estos recintos cerraron de manera definitiva, mientras que otros se han convertido en albergues de algún trabajador sanitario que solo se limita a revisar a las personas y darles recomendaciones de salud, algo así como un consejero comunitario.
“Los Centros de Diagnóstico Integral (CDI) van por las mismas andanzas, no hay medicinas, no tienen acondicionamiento, los laboratorios no sirven y si hay tensiómetros es mucho. Los únicos CDI que, por solo mencionar el caso de Barcelona, funcionan bien son el de La Matanza y el de Campo Claro. Incluso el de Boyacá V registra déficit de todo tipo”, manifestó Yaguaracuto.
En el caso de las zonas rurales, dijo que los módulos se han quedado prácticamente vacíos por las fallas. Acotó que, además, los directivos envían a los trabajadores a las instalaciones sanitarias más céntricas, donde haya condiciones más adecuadas.
Puerto La Cruz / Milena Pérez