Los equipos River Plate y Boca Juniors, ambos de Argentina, asestaron sendos ‘golpes de estadio’ en canchas de Brasil, su más grande rival futbolístico, y garantizaron su presencia en una inédita final por el título de la Copa Libertadores de 2018. Esta será la primera vez en la historia del más antiguo torneo de clubes del mundo, que se juega desde 1960, que los dos mayores equipos argentinos se medirán en la final.
Boca Juniors igualó 2-2 este miércoles con Palmeiras y dejó la serie de semifinales con un marcador global de 4-2 a su favor dado el triunfo por 2-0 de la ida en la Bombonera. Será la undécima final de la Libertadores que dispute el conjunto xeneize, seis veces campeón del certamen y dirigido desde 2016 por Guillermo Barros Schelotto.
Ramón ‘Wanchope’ Ábila y Darío Benedetto anotaron los tantos de Boca, mientras que Luan y el paraguayo Gustavo Gómez, de penalti, convirtieron los de Palmeiras, que tras el empate necesitaba anotar tres goles más para ser finalista e ir a la disputa del trofeo que no consigue desde 1999 cuando también lo dirigía Luiz Felipe Scolari.
River Plate cumplió el martes lo que había anunciado su entrenador, Marcelo Gallardo, al afirmar que el equipo argentino iba a Brasil “a conseguir una hazaña” a expensas del campeón de la Libertadores en 2017, Gremio. Y vaya que lo fue. A los 35 minutos Leonardo Gomes anotó el 1-0 para el conjunto de Porto Alegre, que así se confirmaba en la final ya que había ganado por idéntico marcador el duelo de ida en Buenos Aires.
Puerto la Cruz / Redacción web