En menos de un mes, la empresa naviera estatal Conferry volvió a ser noticia. Tras naufragar el pasado 7 de agosto el buque “Tallink Express” en el puerto de Guanta, ahora le tocó el turno al “Rosa Eugenia” en la bahía de Pozuelos, que este lunes en la tarde se fue a pique. La falta de mantenimiento y achique a la embarcación habrían provocado que se hundiera en 60%.
Así se conoció de manera extraoficial, pues el jefe de mantenimiento de la empresa, Lucio Hurtado, no se encontraba disponible para declarar.
El buque estaba desincorporado de la flota desde hace tres años. De hecho, algunos trabajadores, a quienes se les reserva su nombre por no estar autorizados para hablar con los medios, comentaron que sólo queda uno solo para cargar pasajeros, de los 11 que había cuando la empresa fue expropiada por el Gobierno. El transporte de carga depende ahora de la compañía privada Navibus, que colabora con Conferry con una de sus naves.
“Estamos viendo cómo se cae la empresa en nuestra cara. Desde hace tiempo se venía proponiendo que se vendieran esos barcos desincorporados para que la empresa tuviera ingresos para comprar otros o para que tuviera recursos, pero ni los vendieron ni les hicieron mantenimiento”, expresó uno de los 500 trabajadores que le quedan a Conferry.
El que se hundió el 7 de agosto aún no ha sido reflotado supuestamente porque es un área muy profunda, pero se conoció que continúan trabajando para rescatarlo.
Puerto La Cruz / Elisa Gómez