Cada vez son menos las estaciones de servicio (E/S) que expenden combustible a precio subsidiado en Cumaná, por lo que las colas en las pocas que quedan son interminables, situación que obliga a los usuarios a tomar la opción de las denominadas premium o dolarizadas.
Sin embrago, pese a que en estas estaciones se paga el precio del combustible a precio internacional, sin ningún beneficio por parte del gobierno, los cumaneses denuncian que se ha vuelto cuestión de suerte poder surtirse allí.
Alegan que se supone que las opciones de pago deberían ser fáciles, pero no es así, ya que en unas no aceptan bolívares por punto a ciertas horas, mientras que en otras no hay puntos de venta disponibles, y en ocasiones sólo aceptan divisas.
Ana María Torres señaló que muchas veces si no tienes efectivo no puedes pagar. “No siempre cargo divisas o bolívares en efectivo. Lo ideal sería que pudiéramos pagar sin problemas. Además las horas cuando uno sale del trabajo, y que puede ir a las bombas, las oficinas de pago cierran y si no tienes dinero en físico no pones gasolina”.
Comentó que en caso de venir con una emergencia, es decir con poco carburante, te quedas “botado” porque no es tan fácil saber qué método de pago está funcionando, “es cuestión de suerte”.
Por otra parte, hay algunas que no tienen punto de venta, lo que dificulta aún más la posibilidad de surtir combustible en la capital del estado Sucre.
“En Cumaná poner gasolina es un tema. Hay que estar buscando la bomba que acepte bolívares, si no tienes dólares; y que acepte punto, si no tienes efectivo”, comentó Marlos Pérez, conductor de taxi.
Con esta opinión coincide Juan Cardozo, quien más de una vez ha tenido que recorrer varias estaciones para poder colocar gasolina a su vehículo.
“Las oficinas de pago trabajan según sus horarios, si vas a mediodía no están y ya muchas a las 5:00 de la tarde se encuentra cerradas, lo que te obliga a tener efectivo”.
Los afectados piden a las autoridades revisar lo que ocurre con las estaciones de servicio a fin de que esto deje de ser un dolor de cabeza para los cumaneses, que no pueden acceder a las bombas subsidiadas.
Cumaná / GL – Corresponsalía Cumaná
