Más de medio centenar de peruanos marcharon este jueves por las calles de Lima protestando contra la cuarentena ordenada por el gobierno para detener los contagios por el nuevo coronavirus.
Varios con la mascarilla colgando del cuello, o dejando descubierta la nariz, llevaban carteles con frases como “el uso de la mascarilla es un peligro para la salud” o “no al toque de quiebra”.
Los manifestantes se oponen al encierro decretado en la capital y otras regiones del país porque afirman que perjudicará los negocios y creen que el virus sólo ataca a personas vulnerables.
“Son 15 días que no vamos a trabajar, ni tener ingresos. ¿Con qué vamos a comer? El pueblo quiere salir a trabajar”, dijo Andrea Medina, una de las que marchaba. “Comienzan 15 días y luego otros 15 más y así vamos a estar tres o cuatro meses encerrados”, indicó.
Algunos se identificaban como simpatizantes de partidos de derecha y otros de izquierda. Antes de marchar, varios discutieron entre ellos descalificándose por sus ideas políticas.
El martes el gobierno del presidente interino Francisco Sagasti anunció una cuarentena en la capital y otras regiones del país que empezará el domingo hasta el 14 de febrero. Los hospitales están colapsados por un incremento de las infecciones por el nuevo coronavirus.
Es la segunda vez que Perú retorna al encierro. La primera cuarentena duró 106 días y provocó un descalabro de la frágil economía local cuyo producto interno bruto cayó 12 puntos en 2020.
Perú, de 33 millones de habitantes, espera la llegada de un millón de dosis de la farmacéutica Sinopharm para vacunar al personal de salud. No hay fecha de vacunación para el resto de la población.
En menos de un año de iniciada la pandemia han muerto más de 40.000 y se han infectado más de un millón de habitantes.
Lima / AP
