El ministro israelí de Exteriores, Eli Cohen, advirtió este martes en el Consejo de Seguridad que «Occidente es el próximo» en lo que llamó «la guerra del mundo libre» contra el terrorismo, simbolizada por el grupo islamista Hamás, al que equiparó con los nazis.
«Esta guerra nos la han impuesto, no hubo opción. Nos fue impuesta y no es solo la guerra de Israel, sino la del mundo libre», dijo en un debate abierto en el Consejo, que tendrá una cantidad récord de intervinientes.
«Los terroristas no tienen en mente solo la destrucción de Israel: su sueño es el mundo entero», insistió.
Cohen alejó cualquier posibilidad de un alto el fuego en Gaza: «¿Cómo puedes aceptar un alto el fuego con alguien que ha jurado matarte (y) destrozar tu misma existencia?», se preguntó, y a continuación dio la respuesta: «La respuesta proporcional a la masacre del 7 de octubre es la destrucción total de Hamás. No es solo nuestro derecho, es nuestra obligación», dijo en un tono muy airado.
El ministro, que acompañó su discurso con fotografías de los niños secuestrados por Hamás y con un audio atribuido a uno de sus militantes -en el que supuestamente se jacta de matar a diez judíos en una conversación con su madre- tuvo palabras de agradecimiento para Estados Unidos.
Alabó al presidente Joe Biden y a su ministro de Exteriores, Antony Blinken, «por mostrar esa claridad moral y apoyar a Israel en estas horas oscuras», pero fue muy duro con el secretario general António Guterres por haber solicitado repetidamente un alto el fuego: «Señor secretario general, ¿en qué mundo vive usted?» le dijo a Guterres, presente en la sala.
Cohen llegó a decir que la Organización de Naciones Unidas (ONU) «no tendrá razón de ser si las naciones que la forman no se ponen del lado de Israel «y de los principios básicos de la humanidad que describe la carta de la ONU».
Tel Aviv / EFE