Para los conductores que circulan diariamente por la avenida Fernández Padilla de Clarines, capital del municipio Bruzual del estado Anzoátegui, esquivar huecos se convirtió en una suerte de "deporte de alto riesgo".
¿El motivo? los cráteres que hay en la arteria vial de la localidad de la zona Oeste de la entidad oriental ponen en peligro su integridad física, al punto de que varios vecinos de la zona -que prefirieron mantenerse en el anonimato- aseguraron que varios conductores temen pasar por esa zona.
"Allí han caído carros y personas de noche porque también carece de alumbrado público", explicaron los pobladores de Clarines que se quejan de la falta de atención por parte de las autoridades gubernamentales, pues ellas no asfaltan un tramo que es muy transitado.
"Los gobernantes no les prestan atención a nuestras denuncias y por ese motivo en la avenida Fernández Padilla nunca vemos mejoras. Esperamos que pronto atiendan nuestras necesidades".
En Clarines la falta de bacheo no es lo único que preocupa a sus habitantes, pues ellos también se quejan de la insalubridad que reina en el mercadito de Clarines, donde las personas acuden periódicamente a comprar sus alimentos. El recinto se encuentra a escasos metros de un camposanto.
Los afectados aspiran a que los gobernantes activen, a la brevedad, un plan de limpieza en el expendio de comida, con el fin de que eso les permita a los consumidores adquirir productos libres de cualquier tipo de contaminación.
"El mercadito ubicado en frente del Cementerio Norte de Clarines trabaja con condiciones mínimas de salubridad y eso es inconcebible", explicaron los ciudadanos. "Los vendedores no cumplen las normas requeridas para la expender verduras, víveres y otros rubros. Necesitamos que eso se corrija".
Esperan que los empleados de la Alcaldía de Bruzual trabajen para acabar con la polución, pues los transeúntes no soportan el hedor que del expendio de comida.
Clarines / Joseph Ñambre