Una estudiante de Ingeniería Civil de la Universidad de Oriente (UDO), en Barcelona, fue víctima de la delincuencia el pasado jueves, mientras se dirigía a su salón de clases.
La joven, que cursa séptimo semestre, caminaba por los pasillos de esa escuela cuando fue abordada por dos antisociales.
“Dame todo lo que tienes”, le dijo uno de los sujetos, que se le puso al frente. “Te daré mi comida, que es lo único que tengo”, le respondió ella.
En ese momento, el segundo ladrón la apuntó con lo que la muchacha creyó que era un arma, por lo que procedió a entregarles el celular.
La estudiante explicó a sus compañeros que después de que entregó el teléfono, los delincuentes se fueron “como pedro por su casa”. Se retiraron por el mismo pasillo de Ingeniería y cruzaron por el centro de copiado que la comunidad udista llama “barrio chino”. La joven los siguió con cautela.
Vigilancia dormida
Cuando la afectada llegó a la entrada principal de la casa de estudios, pidió ayuda a un uniformado de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que yacía dormido en una patrulla.
Después de despertarlo le indicó el camino que habían tomado los ladrones. Sin embargo, cuando estos notaron que los seguían, emprendieron la huida hacia el sector Los Jardines, una invasión ubicada al lado de la universidad, que, según los propios habitantes del lugar, sirve de refugio de delincuentes.
La muchacha explicó que los ladrones parecían estudiantes, debido a que cargaban morrales como el resto de los alumnos.
Para el dirigente estudiantil por el partido Acción Democrática (AD) en la UDO, Gilberto Román, estos asaltos a mano armada son un reflejo de la situación país.
Exhortó al Gobierno nacional a regresar la policía del estado a la Gobernación.
Puerto La Cruz / Grisnel Guevara