Desde junio del año pasado, alumnos de la Universidad de Oriente (UDO) Núcleo de Anzoátegui, en Barcelona, han tenido que ver clases a oscuras por el robo del cableado de la central eléctrica ubicada en el área de Básico, explicaron los estudiantes.
Hernán Díaz, quien cursa octavo semestre de Ingeniería Civil, manifestó su incomodidad por verse obligado a estar en las aulas en estas condiciones y apuntó que no concibe el hecho de que las autoridades no se hayan interesado en tratar de resolver la falla.
“Una cosa es que no haya recursos para arreglar los problemas que hay en la UDO, que son muchos y otra cosa es que ni siquiera se interesen en solucionarlos. Y no sólo es la falta de luz, es la universidad en general que se está cayendo”.
Andrés Guevara, quien el pasado 10 de enero comenzó el primer semestre de la misma carrera que cursa Díaz, dijo estar muy decepcionado del estado en el que vio las instalaciones de la conocida como la casa más alta del oriente del país.
“Toda la universidad es un desastre. Es difícil ver clases sin luz porque la falta de aire acondicionado o cualquier tipo de ventilación hace más incómoda la estadía en el lugar”.
Contra viento y marea
En el área de Básico, donde todos los alumnos que ingresan a la UDO cursan los primeros semestres de sus carreras, hay lugar para ocho comercios, de los cuales únicamente dos se mantienen en funcionamiento: un centro de fotocopiado y una papelería.
Argenis Paricaguán, encargado de este último, explicó que los seis negocios que cerraron indefinidamente sus santamarías lo hicieron por el problema de la electricidad. Él, por su parte, sigue laborando “contra viento y marea”.
Explicó que las ventas en ese local han bajado hasta 80% debido a que no tiene punto de venta. Esta situación representa un desafío para él porque es su única fuente de ingresos y al día apenas hace 70 mil bolívares.
Señaló que un lápiz cuesta entre 10 mil y 15 mil bolívares, al igual que las borras, mientras que una hoja de examen vale hasta 4 mil bolívares.
Dijo que la falta de efectivo ha perjudicado el movimiento en el negocio porque los alumnos gastan en lo más indispensable.
Deterioro
Para Bulmaro Lanz, encargado de uno de los comercios que se en- cuentran en el área de Básico, la infraestructura de la UDO en general se ha deteriorado hasta 90%. “La situación del país nos ha traído hasta aquí”, dijo.
Barcelona / Grisnel Guevara
