Son cinco los jóvenes imputados por el caso del club conocido como Los Cotorros, ubicado en El Paraíso, Caracas, en el que el pasado 16 de junio fallecieron 19 personas, tras una supuesta riña en la que fue activado un artificio lacrimógeno.
La información la dio a conocer este miércoles el fiscal general de la República designado por la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Tarek William Saab, en rueda de prensa desde la sede del Ministerio Público (MP), en Caracas, donde precisó que los cinco responsables fueron imputados por ser presuntos coautores en el delito de homicidio intencional calificado con alevosía y por motivos fútiles y por el mismo delito en grado de frustración.
Destacó que el MP está investigando la procedencia de la bomba lacrimógena, la cual, según han confesado los imputados, fue comprada en Catia, al oeste de Caracas.
Entre los cinco imputados hay cuatro menores de edad y uno de 19 años de nombre Gilberto Alejandro Petit Quintero, además fue aprehendido el encargado de seguridad del establecimiento.
Además, a Petit Quintero le fueron precalificados los delitos de uso de adolescentes para delinquir, detentación de artefacto explosivo y agavillamiento, mientras que a los cuatro adolescentes adicionalmente se les imputó detentación de artefacto explosivo y agavillamiento, y a uno de ellos por uso de facsímil, detalló el fiscal.
Saab refirió que en el local, mientras se realizaba una fiesta, un adolescente activó una bomba lacrimógena y adicionalmente otro joven impidió la salida de las víctimas del lugar al portar un arma de fuego falsa, hecho que dejó 19 personas fallecidas.
Destacó que la responsabilidad de estas personas se logró determinar a través de experticias, videos de cámaras de seguridad e interrogatorios en los cuales los responsables confesaron que la bomba fue comprada en Catia, al oeste de la capital.
Caracas / AVN
