El Gobierno de Guyana, encabezado por su presidente Irfaan Ali, reafirmó su compromiso con «la solución pacífica» de su disputa con Venezuela por la región del Esequibo, y saludó el comunicado del Consejo de Seguridad de la ONU sobre este tema.
«Guyana está comprometida con la solución pacífica de la controversia con Venezuela en pleno apego al derecho internacional a través del proceso de la Corte Internacional de Justicia y expresa su agradecimiento a los miembros del Consejo de Seguridad por su valiosa consideración de este tema de gran importancia para los dos países y la región», indicó el Gobierno en un comunicado.
El Gobierno de Guyana expresó asimismo su esperanza en que la declaración del Consejo de Seguridad «contribuya al mantenimiento de la paz y la seguridad regionales y a garantizar que América Latina y el Caribe siga siendo una zona de paz».
El lunes, el Consejo de Seguridad emitió un comunicado de prensa en el que sus miembros expresaron su preocupación por «la posible escalada de tensiones entre Venezuela y Guyana».
Instaron a las partes a «ejercer la máxima moderación», recordándoles sus obligaciones de cumplir con la orden de medidas provisionales emitida por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) el 1 de diciembre de 2023.
El Consejo también subrayó la importancia de mantener la paz y la seguridad regionales y garantizar que la región de América Latina y el Caribe siga siendo una zona de paz.
Por ello, instó a las partes a «resolver sus diferencias por medios pacíficos y a cumplir sus obligaciones en virtud del derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas».
Además, reafirmó la importancia de defender los principios de respeto a la soberanía e integridad territorial y la prohibición, a cualquier parte, de la amenaza o el uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de otro Estado.
La crisis entre Caracas y Georgetown se reavivó con la reciente promulgación por parte de Venezuela de la Ley Orgánica para la Defensa de la Guayana Esequiba.
Esta ley tiene el objetivo de dar un marco legal a los planes venezolanos de anexionarse la región del Esequibo, de unos 160 mil kilómetros cuadrados, rica en petróleo y recursos naturales y bajo control de Guyana.
Georgetown / EFE