Según el Observatorio Nacional de Derechos Humanos, hasta el mes de mayo de 2021 se habían registrado 89 detenciones de trabajadores de la industria petrolera venezolana por alzar su voz de denuncia en contra de lo que definen como "la destrucción de la empresa estatal Pdvsa".
El hecho más reciente reportado por el secretario de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros (Futpv), José Bodas, fue el del sindicalista del Movimiento 21 de Enero, Henry Sánchez, quien reside en Cabimas, estado Zulia.
El jueves 26 de agosto, Sánchez recibió amenazas de detención por encabezar asambleas en respaldo de 700 petroleros a los que les suspendieron el bono de transporte y salarios.
Bodas rechazó que la batalla en defensa de los derechos laborales y sociales sea considerada por los directivos como un crimen, a fin de silenciarlos. Condenó que los trabajadores sean encarcelados, perseguidos y acosados en sus puestos de trabajo, mientras los verdaderos "destructores de la industria" están libres y gozan de todo tipo de privilegios.
Responsabilizan al presidente de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores (Cbst) y Futpv, Will Rangel, por lo que le ocurra a los trabajadores que son aprehendidos de manera injusta, por el hecho de exigir mejores condiciones económicas y de trabajo.
Sostuvo que para el 30 de agosto los petroleros zulianos están convocando a una protesta en apoyo al compañero Demostle Velásquez, quien fue citado a la Fiscalía 47 de Cabimas por defender las causas laborales.
Puerto La Cruz / Milena Pérez