La presidenta de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras) en Anzoátegui, Monique Loffredo, señaló la mañana de este lunes que el retraso en el ajuste del valor de la Unidad Tributaria (UT) hace que hasta las pequeñas y medianas empresas deban cobrar el Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF), como lo establece la Reforma de la Ley, que entró en vigencia el 28 de marzo.
“Con la Unidad Tributaria en Bs 0,02, es decir, distorsionada con respecto a la realidad inflacionaria, el Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) ha calificado como contribuyentes especiales a gran cantidad de comercios y empresas de servicios tales como pequeños abastos, cafeterías, panaderías, tiendas de ropa, calzado, farmacias y hasta colegios”, señaló.
Según Loffredo, los han colocado como sujetos pasivos especiales por tener ingresos brutos anuales superiores a los Bs 600 o más de Bs 50 mensuales, en los últimos 6 meses.
Por lo tanto, la representante del gremio comercial en la entidad aseguró que el IGTF afecta a todo tipo de consumidor y no sólo a quienes acuden a las grandes empresas y realizan pagos en divisas.
Falta
Por otro lado, Loffredo manifestó que si uno de los objetivos de este impuesto es incentivar el uso de la moneda nacional, el Bolívar, por ahora no existe suficiente circulante para atender todas las necesidades de pago de los consumidores y de los agentes de retención que deben enterar en bolívares el 3% de lo recaudado en divisas.
Ante las dudas que existen en el gremio, la representante mencionó que las cámaras afiliadas han estado realizando charlas en los diferentes municipios de la entidad con el apoyo de una firma de consultores, para actualizarse en la materia.
Puerto La Cruz / Elisa Gómez