Parte de un acuerdo firmado entre la administración de Nicolás Maduro y partidos minoritarios de oposición, como el Movimiento al Socialismo (MAS) y Avanzada Progresista (AP) entre otros, es la designación de nuevos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE), así como el retorno de los 54 diputados del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) y sus aliados que se retiraron de la Asamblea Nacional (AN) a raíz de la declaratoria de desacato por parte del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) contra el parlamento.
Con la incorporación de los diputados pesuvistas y sus aliados cobra fuerza la posibilidad de la renovación del Poder Electoral. ¿Podría lograrse un CNE equilibrado e imparcial? ¿Sería posible a partir de allí llamar a elecciones presidenciales? Son las grandes interrogantes que expertos y voceros políticos creen que podrían encontrar una respuesta positiva si Miraflores y la oposición se sientan a negociar en serio.
Figuras políticas como Timoteo Zambrano y Claudio Fermín también propusieron un estatuto electoral que hace dos meses el parlamentario José Antonio España dijo haber consignado ante la directiva de la AN, en el que se sugiere un lapso más corto para escoger a los rectores y que podría ser viable si el acuerdo político en la AN se concretara.
El director del Observatorio Electoral Venezolano (OEV), Luis Lander, apuntó que con la Ley Orgánica de Procesos Electorales (Lopre) aparecen dos días para cada una de las distintas etapas (de escogencia de los rectores), pero eso es para condiciones normales y “claramente en Venezuela no lo estamos desde hace tiempo, lo que hace que las condiciones electorales sean complicadas y, más que fijarse en los plazos establecidos en la ley, es necesario tratar de alcanzar un acuerdo político estable entre los principales actores y en ello está la manera de resolver el problema del CNE”, señaló.
“No es que a la legislación electoral haya que saltársela pero es necesario un mecanismo que permita, mediante acuerdo político, acelerar los procesos. Siempre hemos sido partidarios de elecciones pero no a la carrera, porque si se atropellan los tiempos la posibilidad de hacer una buena elección se deteriora, pero si se pudiera llegar a un acuerdo político reconocido por la sociedad podría ser posible”, expresó Lander.
El experto indicó que una renovación del CNE pasa por designar a los cinco rectores principales, con sus suplentes, mediante las 2/3 partes de los integrantes (112 diputados) de la AN, y una vez nombrados tendrían como primera tarea compleja la reestructuración del aparato administrativo del ente, el cual advirtió es grande porque tiene oficinas en los estados.
También cree viable la realización conjunta de unas elecciones presidenciales con las parlamentarias, previstas para el año que viene, que deberían convocarse con al menos seis meses de antelación, si existe voluntad política, especialmente de la gestión madurista.
AN y selección del CNE
El diputado José Antonio España expresó que la vuelta del oficialismo a la AN sin importar si sus miembros son o no constituyentes, no es para “buscar obstáculos que dificulten aún más los procesos”, también debería ser posible el regreso de los diputados opositores en el exilio o en la clandestinidad, y que es muy importante que se levante el desacato.
“El proceso de selección de los rectores puede llevar 74 días pero con el estatuto que presentamos se puede acortar y una vez que se tenga a un CNE imparcial podría venir una ruta de acuerdos parciales que también propusimos y los subtítulos como es la organización de un proceso electoral en sí y considerar aspectos como la votación de los venezolanos en el extranjero, pero lo primero es tener a un nuevo CNE”, expresó España.
El dirigente de Un Nuevo Tiempo (UNT), Vicente Bello, aseguró que la oposición en la AN cuenta con las 2/3 partes para establecer por sí sola un renovado Poder Electoral porque los suplentes de los exiliados y los que se encuentran en la clandestinidad están activos y asisten a las reuniones de las comisiones y sesiones, pero reconoció que tampoco tendría caso y sería “llover sobre mojado” igual que si lo hiciera el TSJ o la ANC. En este último caso sería ilegal, porque es preciso que los grupos de Maduro y Guaidó se pongan de acuerdo para superar la crisis. A diferencia de España, recalcó que no todos los legisladores progobierno que se fueron pueden regresar porque desempeñan otro cargo público, pues constitucionalmente están impedidos, pero recordó que están los suplentes.
“Los diputados del Psuv pueden regresar a la AN cuando quieran, salvo quienes asumieron cargos de ministros, alcaldes, gobernadores y constituyentes, pero tienen sus suplentes que en muchos casos no son del Psuv sino de organizaciones del Gran Polo Patriótico, pues ellos tiene que resolver y presentarse”.
El regreso de los psuvistas se concretó este martes 24.
Para aprobar el acuerdo que anuncie un nuevo CNE basta con la asistencia de los parlamentarios acreditados y luego se iniciarían los procedimientos establecidos por la ley (electoral) y la Constitución para la designación de los rectores, como es el nombramiento de un comité de postulaciones y otra serie de pasos que llevarían mes o mes y medio”, dijo Bello.
Bello también cree que lo más complejo es lograr el esperado acuerdo político y que a partir de allí, temas como los aspectos técnicos de unos eventuales comicios no presentarían tantas dificultades.
Caracas / Deisi Martínez
