El nivel de conflictividad debido a la escasez de agua en la parroquia Bolívar parece haber escalado hacia la violencia, ante documentadas y difundidas peleas entre vecinos, por el manejo del poco recurso que se recibe por tubería en sectores donde la llegada del líquido vital era una apuesta segura.
Y fue lo que ocurrió el lunes en la noche cuando un grupo de parroquianos se enfrentó a golpes por la administración de la llave que abre el servicio a varias zonas de Playa Grande.
Los reclamos son concretos y fue el caso de Luisa González, vecina de Valle Hondo, en cuya zona baja no se recibe agua desde hace poco más de un mes.
Elvira Luna, otra residente del sector, dijo que el problema es insostenible, cuando no alcanzan para comprar agua a cisternas privadas.
Los afectados pidieron al gobernador Gilberto Pinto que intervenga para que se busque una solución rápida, porque los conflictos están a la orden del día.
A las voces de Valle Hondo, se unieron las de Luis Mundarain en Virgen del Valle, quien se quejó de que cada vez que toca agua para la zona dura cinco minutos y a fuerza de bombas.
En La Marina, Agustín Lárez, dijo que de un tiempo a esta parte hay que estar pila porque el agua llega a horas imposibles, poquitica y se va enseguida.
La escasez de agua es un problema que se ha venido acentuando en los últimos años en el municipio Bermúdez, sobre todo porque en los pasados cuatro años prácticamente no se hizo nada para evitar que el tubo El Carupanero se siguiera deteriorando.
En los dos últimos meses, sectores donde llegaba agua regularmente, el recurso desapareció de las tuberías, lo cual provoca no pocos problemas porque se trata de zonas donde los vecinos no acostumbraban a comprar agua a cisternas.
Fue una tarea imposible lograr una explicación de Luis Cova, subgerente de la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe), en la zona Sucre-Este, sobre el problema y si están diligenciando soluciones.
Por las informaciones dadas por el alcalde Julio Rodríguez, El Carupanero está afectado por múltiples averías y tomas ilegales, que disminuyen la presión y hacen que los 1.600 litros que salen de Clavellinos se diluyan en el camino, dejando en indefensión a un municipio que prácticamente no cuenta con fuentes de agua propias.
En la sesión de Cámara Municipal de Bermúdez de este martes se abordó el tema y el concejal Rosauro Pereira, presidente de la Comisión de Servicios, informó que se convocó a Hidrocaribe, para buscar soluciones a una situación que se está agravando.
El edil explicó que se reunieron con la encargada de redes del ente para escuchar sus planteamientos y la funcionaria propuso hacer una mesa técnica de emergencia con todos los involucrados.
Ante lo cual Pereira recomendó la presencia de Luis Cova, subgerente de Hidrocaribe, quien debe tomar decisiones que favorezcan soluciones. Una de las salidas sería el manejo del llaveo de acuerdo a un cronograma.
Pero el problema parece ser mucho más grave que el manejo inadecuado o arbitrario de las llaves, de acuerdo a lo que explicó el edil.
Uno de esos males sería que los cisterneros abrieron un llenadero sin autorización y que afecta la presión de la tubería madre, en el sector Mareca, así como en las cercanías de la playa y otro en La Vivienda de Playa Grande, que se presume esté ubicado hacia la zona donde empieza la salina.
“No hay autorización ni de Hidrocaribe ni de la alcaldía para el llenado de camiones ahí y se aspira que esas tomas sean totalmente selladas”.
Igualmente, Pereira adelantó que se va a hacer una evaluación desde la entrada de Güiria de la Playa hasta la entrada de los Bloques para medir la presión, que permita establecer un cronograma de suministro.
Agregó que se requiere el apoyo de los cuerpos de seguridad, porque hay llaveros que han renunciado porque reciben amenazas presiones en sus residencias. Y pese a lo delicado del tema no ha habido apoyo de los cuerpos de seguridad.
Pereira cree que la reunión debe darse entre jueves y viernes, por lo cual se está llamando a las autoridades de la hidrológica, Recursos Hídricos de la alcaldía, cámara y poder popular, para que se concrete la asamblea.
“Queremos saber el cronograma, el pueblo del municipio Bermúdez quiere saber de acuerdo al eje, si me falla el agua cuál sería el plan B, cuál sería el plan C”.
Advirtió a las personas que están jugando con el llaveo, que no se metan en problemas porque “le van a hacer la visita en sus comunidades”.
Lamentó que haya vecinos que apañen estas conductas y afecten a comunidades completas. “Ahí hay un saboteo también”.
Bermúdez / Cecilia Lárez