Desde 2015, el personal de la Unidad de Diálisis del Hospital Universitario Luis Razetti de Barcelona se encuentra de brazos caídos, sin poder ofrecer sus servicios, por no contar con las condiciones necesarias para laborar.
Y es que pese a que en 2021 la Gobernación del estado Anzoátegui realizó varias inversiones para ponerla en marcha, los avances no superaron el 60% de lo requerido.
Según el coordinador del Movimiento de Trabajadores de la Salud en la entidad (Motrasalud), Edisson Hernández, las siete máquinas para dializar continúan inoperativas, hay fallas en la climatización y persisten las filtraciones de aguas negras en algunas áreas.
Mencionó que el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) ha realizado inspecciones para atender las reparaciones de los equipos, pero no avanza en el proceso de recuperación.
“También vinieron autoridades de esta nueva gestión de Luis Marcano y quedaron en que iban a colocar el enrejado para proteger los alrededores porque la mayoría de las ventanas son violentadas con facilidad y del aire central se han llevado algunas piezas. Esperemos que está sea una de las primeras promesas en cumplir, porque de verdad que sin seguridad, de nada valen los arreglos”.
Condiciones
Hasta el área de consulta se encuentra paralizada debido a que los dos especialistas no pueden atender a las personas por el calor existente debido a la falta del aire acondicionado.
Hernández también manifestó que en la unidad cuentan con siete camas para los servicios nefrológicos, pero no tienen colchón.
Barcelona / Elisa Gómez