Setenta y cinco años de tradición educativa de excelencia y una declaratoria de Patrimonio Cultural nacional y su inclusión en el catálogo de obras arquitectónicas protegidas por el Estado, así como la declaratoria de Patrimonio Municipal de Bermúdez, le sirven de poco últimamente a quienes hacen vida en la Escuela “República de Haití”, enclavada en pleno corazón del Carúpano urbano.
Y es que la emblemática estructura, que ha visto pasar unas cuantas generaciones de bermudenses, se fue deteriorando, lógicamente, en una combinación del paso de tiempo y la acción de los elementos.
La escuela fue construida en el gobierno del general Isaías Medina Angarita en 1946 y entró en servicio en 1947. Cuenta actualmente con 75 años.
Nuevamente, los Bomberos municipales, acudieron al plantel e incluyeron en la inhabilitación de uso que existe desde hace unos cuantos años, la recomendación de no usar el pasillo central, que une las dos alas, que se desmigaja un poco todos los días.
La docente María Vargas, directora encargada desde hace diez años, explicó que l escuela tiene dos módulos de aulas, ocho en cada ala, en una de las cuales luchan con las carencias y el deterioro todos los días.
Dijo que en 2012 se aprobó un proyecto de rehabilitación, que alcanzó solo para una de los módulos y quedaron fueran estructuras como la cocina y el comedor. Tampoco se hizo nada en el anfiteatro, que está en muy mal estado.
“El trabajo que hicieron quedó muy bien, pero después comenzó la inflación, subió todo, y la obra se paralizó. No aprobaron más recursos, y después vino la pandemia y esta ala quedó sin nada”.
Vargas señaló que el módulo completo está inhabilitado, “pero de guapos lo usamos, porque necesidad obliga”. Agregó que los niños deben pasar por el pasillo central, porque el baño está del lado malo.
Evidente
La escuela exhibe los desprendimientos de mampostería y daños en los techos, debido a las filtraciones. Además, las obras de los baños en el módulo rehabilitado quedaron inconclusas, por lo que entre todos los docentes y personal, pagarán la conexión de los sanitarios a la red de aguas servidas del sector. La idea es sacar de servicio los baños que funcionan en el lado que está en mal estado, para que los niños no sigan pasando por la zona de los desprendimientos.
La institución atiende una matrícula de 345 estudiantes, más 85 con necesidades especiales, de la Unidad Psicoeducativa “Prof. José Vicente Domínguez”, que funciona en la institución, mientras que en tres salones desocupados del ala con problemas, atiende la Unefa a una población estudiantil bastante grande.
La docente resaltó que la población estudiantil proviene de diversos puntos del municipio, porque en su mayoría se trata de niños con padres que trabajan en el centro de la ciudad.
En condiciones óptimas el “República de Haití” podría atender a unos mil estudiantes. Sin embargo, hace un buen tiempo que no reciben noticias sobre un posible reinicio de obras.
Además, en la institución laboran 56 docentes, 36 obreros y cuatro cocineras, que aspiran ver el plantel en mejores condiciones.
Es el caso de la docente Maribel Granado, quien pidió a los entes gubernamentales tomen en cuenta la situación que están presentando en la institución desde hace mucho tiempo.
Dijo que el deterioro de la institución la hace no estar acorde para los niños, por lo que insistió en que las autoridades deben actuar. “Cumplan con el deber de mantener una institución digna para los niños”.
José Luis Vallenilla, también educador, pidió al gobierno que se manifieste con las obras de la escuela, “que nos dé una mano, que la institución alberga muchos niños, 345. Es una estructura que con este tiempo de lluvia va a venirse abajo”.
Bermúdez / Cecilia Lárez
