Los habitantes del sector Puente Ayala de Barcelona viven una serie de calamidades que se han ido agudizando durante esta cuarentena. Así lo manifestó Rosa Hernández, una de ellos.
La ciudadana denunció que el servicio de agua llega cada ocho días. Aseguró que la rotura de una tubería en la autopista José Antonio Anzoátegui, al sur de la ciudad capital, a la altura del nuevo supermercado Hiper Líder, impide que el líquido llegue con frecuencia a las casas.
Sostuvo que las fallas de transporte también se han agravado. "Por aquí carga un solo autobús hacia los sectores y tenemos que esperar que vaya a llevar pasajeros y vuelva a buscar a los demás y cobra 20 mil bolívares. Los demás se desaparecieron. En varias oportunidades hemos tenido que salir caminando de los barrios hasta la avenida", comentó Hernández.
Denunció que la entrega de comida a través de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), se cumple solo dos veces al año. Indicó que la proteína animal tampoco ha llegado.
Hernández manifestó que la inseguridad en las calles del sector es otro de los factores que los mantiene azotados.
Sostuvo que las condiciones en las que están viviendo les han impedido mantener la calma.
"A nosotros no nos preocupa el COVID-19, sino los pésimos servicios que tenemos en la comunidad. Pedimos a las autoridades que por favor metan la mano y nos ayuden", enfatizó.
Barcelona / Milena Pérez
