El descontento en el sector educativo no solo afecta a maestros y docentes, quienes desde hace años mantienen una lucha incesante para exigir mejoras salariales. Esta crisis también ha afectado profundamente al personal que ejerce cargos administrativos dentro del Ministerio de Educación (ME).
Los empleados del ministerio no solo deben lidiar con retrasos en los pagos, condiciones laborales precarias, falta de materiales de oficina de equipos tecnológicos y la sobrecarga laboral producto de la deserción del personal. El reciente cambio de ministro también conlleva a que se generen situaciones que crean un ambiente de desmotivación y desgaste.
Es el caso de Javier Pérez*, empleado del Ministerio de Educación desde hace más de 16 años en un cargo administrativo, quien denunció que con la designación de Héctor Rodríguez Castro como nuevo ministro de la cartera de Educación “los cambios han sido muy bruscos y drásticos y los principales afectados son los trabajadores”.
Héctor Rodríguez ya tenía experiencia en la cartera educativa porque en 2014-2015, Nicolás Maduro lo designó ministro. En esa primera gestión, duró menos de un año porque lo llamaron para presentarse como diputado ante la Asamblea Nacional.
Pérez expresó que en los dos meses que Rodríguez lleva al frente del ME, se evidencia “la guerra que hay entre los empleados de la administración anterior y la actual”.
Denunció que los cambios en el ME han sido tan bruscos desde la llegada de Héctor Rodríguez que hay gente (como él) que estaba de vacaciones y otros que seguían laborando, pero de igual manera, les suspendieron el pago.
Otro problema que enfrenta el empleado del Ministerio de Educación es que en su reincorporación a sus labores no sabe en qué puesto lo reubicaron.
“Me mandaron para Charallave cuando yo vivo en Petare, es un desorden total, no se entiende qué están haciendo y la situación se repite en todos los estados del país”, denunció.
Javier Pérez afirmó que, de continuar la situación se verá en la obligación de renunciar pues, según él, “es mucho lo que exigen para los 20 dólares que ofrecen”. Sumó que con la situación actual, hace más dinero trabajando como taxista que cumpliendo un horario en un lugar donde no hay ni siquiera mobiliario.
Docentes y maestros también sufren por las decisiones que se están tomando en el Ministerio de Educación. A Cristina Páez*, docente con 17 años de servicio, dos posgrados y además técnico superior universitario en Informática, le suspendieron su sueldo y el mes de aguinaldo que le correspondía.
En declaraciones ofrecidas por Héctor Rodríguez el pasado 12 de noviembre, el titular de la cartera de Educación negó la suspensión de salarios a docentes que trabajan en dos instituciones y aclaró que los maestros que laboran en instituciones públicas y en privadas pertenecientes a la Asociación Venezolana de Educación Católica (Avec), deben laborar en turnos de medio tiempo, para poder cumplir con ambas responsabilidades.
Páez, quien también es docente de la Avec, aseguró que aunque presentó sus constancias de trabajo para demostrar que trabajaba a medio tiempo en dos instituciones y que no incumplía con las normas no le han depositado la primera quincena del mes de noviembre, que es de 750 bolívares, unos 16 dólares al cambio oficial de la fecha.
El pasado miércoles 13 de noviembre, los gremios educativos de Guárico y Táchira denunciaron que más de 3.500 trabajadores del sector educación no recibieron el pago de sus salarios por una supuesta dualidad de cargos.
A Katiuska Carreño*, docente con más de 15 años de servicio en instituciones del Estado, le suspendieron el sueldo desde el mes de septiembre. Asegura que desconoce los motivos de la decisión, pero opinó que “en el Ministerio de Educación reina la improvisación”.
La Federación Venezolana de Maestros (FVM) denunció que la situación salarial de los docentes en Venezuela “ha alcanzado niveles críticos” con salarios que se encuentran por debajo de un dólar diario.
En rueda de prensa, la presidenta de la FVM, Carmen Teresa Márquez, afirmó que actualmente la situación económica ha empujado a miles de docentes a abandonar la carrera para incursionar en otros oficios que les proporcionan mayores ingresos.
Según un monitoreo realizado por la organización en 1000 centros educativos de todo el país, el 74 % de los educadores encuestados expresó que los maestros abandonan la carrera docente por los bajos salarios.
Márquez puntualizó que la imposibilidad de adquirir la canasta alimentaria básica y la falta de seguridad social son los principales problemas que enfrenta el gremio docente en el país.
Para Griselda Sánchez, secretaria de reclamos del Sindicato de Maestros del Distrito Capital, lo que está sucediendo con los docentes y el personal administrativo y obrero dependientes del Ministerio de Educación es una “violación a todos los derechos constitucionales y contractuales”.
Sánchez indicó que al gremio les gustaría que se aclare el trasfondo de toda la situación, pues esto esté sucediendo previo a las navidades: “Es una pena”, recalcó.
La dirigente sindical y líder de la ONG Formación de Dirigentes Sindicales (Fordisi) señaló que “hay un doble discurso” en toda la situación y explicó que les llama poderosamente la atención que, por un lado, Héctor Rodríguez esté llamando a lo jubilados a incorporarse a las aulas de clase, y por el otro, suspendiendo el salario, auque no supera los cuatro dólares al mes.