El gigante de la cosmética Revlon se declaró en bancarrota, aduciendo "problemas de liquidez debidos a los impactos globales producidos por la alta inflación, las persistentes trabas en la cadena mundial de suministros y las obligaciones con sus acreedores", reseñó EFE.
La compañía emitió un comunicado el lunes en el que se acoge voluntariamente al capítulo 11 del Tribunal de Bancarrotas del Distrito Sur de Nueva York.
Según CNBC, una cadena de televisión especializada en noticias, la compañía tenía el 31 de marzo una deuda de 3.310 millones de dólares, mientras que su capitalización de mercado era de 123 millones de dólares en la bolsa de Wall Street.
"La declaración de bancarrota permitirá a Revlon la continuidad de todas sus operaciones mientras trata de reorganizar su estructura de capital y mejorar sus perspectivas a largo plazo".
Nueva York / Redacción Web