El regreso de Rafael Nadal a la competición casi un año después de su último partido, en el Abierto de Australia 2023, donde sufrió una lesión en el psoas de la pierna izquierda, tendrá al austríaco Dominic Thiem como adversario, en la primera ronda del torneo de Brisbane.
Pero antes de ese duelo, Nadal ha vuelto a la competición en el cuadro de dobles, acompañado por su amigo, excompañero y actual entrenador Marc López, de 41 años.
El sorteo del cuadro principal individual del torneo había deparado para el ganador de veintidós Grand Slam un jugador procedente de la fase previa. Tras completarse la ronda de clasificación, Thiem será el primer rival de Nadal en su vuelta, fijada, inicialmente, para este martes 2 de enero.
El austríaco, que precisamente entrenó días atrás con el balear en el recinto de Brisbane, ganó al italiano Giulio Zeppieri por 3-6, 6-4 y 6-4 y se clasificó para el cuadro principal.
Antes de enfrentarse a Thiem, Nadal ha comenzado la competición en el cuadro de dobles, acompañado por su amigo, excompañero y actual entrenador Marc López, de 41 años.
Saltó de nuevo a una cancha el balear que llegó a acumular 209 semanas como número uno y ahora, desde el puesto 672 del ránking, está invitado por la organización para jugar un partido de dobles que perdió, ante los australiano Max Purcell y Jordan Thompson, un dueto consolidado en la modalidad.
Recibido con cariño por los presentes en la pista Pat Rafter Arena del Queensland Tennis Centre, Nadal y López, campeones olímpicos en Río 2016, cayeron en este compromiso de primera ronda por 6-4 y 6-4.
Fue lo de menos. Lo importante fue que, 347 días después de la última vez, Nadal volvió a sentirse jugador. A competir. A sonreír, a juguetear con las bolas entre punto y punto. A disfrutar. A acumular una hora y
El de Nadal y Thiem, será el decimosexto enfrentamiento entre ambos. Nadal ha ganado nueve de los duelos y Thiem, seis, incluidos los dos más recientes, en el 2020, en el Abierto de australia y en las Finales ATP.
El austríaco de 30 años, ahora fijado en el puesto 90 del ránking, cuenta con diecisiete títulos en su carrera incluido el Abierto de Estados Unidos, en el 2020, además de tres finales de Grand Slam, una en Australia y dos en Roland Garros, superado, precisamente, por Nadal.
Rafa Nadal declaró que “hay un alto porcentaje” de que ésta sea la última vez que juega en Australia si decide poner punto y final a su trayectoria deportiva al final de 2024, algo que no tiene decidido.
“El problema de decir que va a ser mi última temporada es que no puedo predecir al cien por cien lo que va a pasar en el futuro.
Por eso digo probablemente. Es obvio que hay un alto porcentaje de que ésta vaya a ser mi última vez jugando aquí en Australia.
Pero si estoy aquí el año que viene no me digáis: ‘Dijiste que (ésta va a ser) tu última temporada’, porque no lo dije”, dijo Nadal, en conferencia de prensa en el Brisbane International.
Nadal admitió que “pasó por mucho para volver a una pista de tenis”, por lo que trató de evitar pensar en la retirada todavía.
“No puedo predecir cómo voy a estar en los próximos seis meses. No puedo predecir si mi cuerpo me permitirá disfrutar del tenis tanto como disfruté los últimos veinte años.
No sé si mi cuerpo me permitirá ser competitivo. Quiero decir, no en el sentido de ganar los eventos más importantes, sino en el sentido que me hace feliz, sentirme competitivo para salir a la pista y sentir que puedo competir contra cualquiera”, comentó.
Después de casi un año alejado de las pistas de juego por una lesión de cadera, Nadal se siente optimista en su regreso.
“En un mundo realista, estoy contento de la forma en que estoy entrenando. Por supuesto no tengo las expectativas que solía tener en el pasado, especialmente al principio, porque ha pasado un año y una operación. No es mucho tiempo practicando a un nivel decente. Para mí, es un poco impredecible cómo van a ser las cosas”, manifestó.
España / Efe