“El Puma” José Luis Rodríguez está listo para volver a cantar.
Después de un doble trasplante de pulmón y más de un año de rehabilitación en el que debió tomar clases y reentrenar su voz, el cantautor venezolano inicia una gira de conciertos que lo llevará por más de 30 ciudades de América y Europa, en países que incluyen Argentina, Canadá, Chile, Colombia, España, Francia, Guatemala, Italia y México.
Denominada “Agradecido Tour”, la gira arranca el sábado con un concierto en Miami Beach, su primero solo desde que cantó en la ciudad colombiana de Barranquilla con un tubo de oxígeno en septiembre de 2016. Culminará en diciembre con una presentación en su natal Venezuela.
“Hay que seguir”, aseguró Rodríguez rozagante en una entrevista con The Associated Press en Miami. “Mientras tenga energía este cuerpo, hay que seguir”.
El intérprete de éxitos como “Dueño de nada” y “Culpable soy yo” mantuvo durante años en secreto su enfermedad y sólo la compartió con su entorno más íntimo. En 2007 fue diagnosticado con fibromatosis pulmonar, una enfermedad incurable que disminuye la capacidad respiratoria. El trasplante fue en diciembre de 2017.
Fe
Con humor y sonriente, dijo que Dios le ha regalado una oportunidad al sacarlo del filo de la muerte. Su supervivencia la atribuye en primer lugar a Dios, luego al haber encontrado un donante y a su familia, a los médicos, a su esposa Carolina Pérez, los amigos que le quedaron y la gente que oró por él.
“Está prohibido quejarse y prohibido olvidar”, señaló “El Puma” al recordar cómo el proceso de la enfermedad lo ayudó a ver la vida de una manera diferente.
A lo largo de la entrevista, en la que reveló que se despidió de sus seres queridos en tres oportunidades que estuvo al borde de la muerte, Rodríguez dijo que se siente saludable. Pero también le pidió a su público que no lo deje y siga rezando por él para que pueda seguir adelante.
“No me suelten todavía. Los necesito”, imploró a sus fans tras explicar que cree en el poder de la oración cuando es desde el corazón.
Repasando los momentos más difíciles de su vida, rememoró que su cuerpo “no daba más” y era similar al de un niño pequeño al que tienen que bañar, vestir y alimentar.
En esos momentos en que sentía que no tenía fuerzas, meditaba, se conectaba con Dios y le pedía una oportunidad más porque había dejado cosas incompletas. Fue allí cuando se dio cuenta de que no había sabido aprovechar su tiempo y quería recuperarlo.
“Gasté fortunas en el tiempo perdido”, admitió el cantante de 76 años. “De eso me arrepiento mucho”, aseguró con voz firme.
Por eso, su consejo para la gente es que no pierda el tiempo peleando o discutiendo por pequeñeces. “Que disfrute cada día, que es un regalo y un milagro de Dios”, dijo tras señalar que no hay que dar nada por sentado sino agradecer por cada una de las cosas que nos provee la vida, desde el despertar cada mañana y poder respirar y tomar agua, hasta tener un hogar.
Expectativa
Poco quiso adelantar sobre cómo serán los conciertos. Sólo dijo que debajo de tres butacas del público elegidas al azar, habrá una etiqueta que les dará a las personas allí sentadas la posibilidad de tomar un micrófono y preguntar lo que quieran.
Antes de esta gira, Rodríguez tuvo dos breves apariciones ante el público: una en un concierto multitudinario que ofrecieron en febrero decenas de cantantes en la ciudad colombiana de Cúcuta para exigir al gobierno venezolano que permitiera el ingreso de ayuda humanitaria; y el otro en una presentación reciente en el distrito artístico de Wynwood, en Miami. El concierto del sábado, sin embargo, será el primero como tal.
Pero la gira no es su única ocupación.
Rodríguez, que saltó primero a la fama como actor de telenovelas, está preparando también un nuevo disco acústico que llevará el mismo título de la gira: “Agradecido”. El primer sencillo, que saldría a finales de mayo, también tendrá ese mismo nombre. Lo compuso con su colega panameña Erika Ender, coautora del megaéxito de Luis Fonsi “Despacito”.
“El Puma” dijo que tras la operación debió reeducar su voz.
“Ten por seguro una cosa: el donante no era cantante”, expresó entre risas, y admitió que nada sabe sobre la persona que le donó sus pulmones porque sus familiares no han accedido aún a hablar con él.
“Me ha costado mucho volver a empezar”, admitió tras explicar que ha tomado clases y ha tenido que “practicar, practicar y practicar” como un niño.
Tal vez por ese tiempo que siente que malgastó prefiere no anticiparse al futuro.
“Voy a vivir cada día con su afán”, aseguró.
Miami / AP