A pesar de que en Venezuela los trabajadores cobran en bolívares, gran parte del comercio fija sus precios con base en la moneda estadounidenses, el dólar.
De acuerdo con un estudio de la firma Ecoanalítica y publicado por la agencia de noticias Bloomberg, el 54% de todas las ventas del mes pasado se realizaron en dólares en el territorio nacional.
Los negocios han actualizado sus formas de pago y han empezado a colocar sus precios en divisas, con mayor auge luego que el presidente Nicolás Maduro dijera que consideraba positivo el proceso de dolarización que estaba viviendo la economía venezolana. Y aunque más de un ciudadano se molesta por la medida, pues aseguran que “nosotros no cobramos en dólares”, ya se ha vuelto una modalidad aceptada.
Melania Ríos, trabajadora de una empresa, señaló que se le hace más “fácil” comprar desde que decidió ahorrar en moneda no nacional por la constante devaluación que esta registra.
“De nada me sirve guardar dinero en bolívares si quiero reunir para comprarme algo. Yo era una de las que se quejaba, pero desde que entendí que tenemos que movernos al ritmo de la economía, las cosas se me han tornado más fáciles”.
“Tener dólares se volvió algo necesario para todos los ciudadanos”, fue el comentario del vecino Luis Astudillo. Manifestó que aunque cobra sueldo mínimo ha podido adquirirlos poco a poco.
“Comprar en otra moneda que no es la nuestra ha hecho que las compras sean menos dolorosas porque no nos mencionan los millones que vamos a gastar, aunque lo sepamos”, explicó Eladio Salazar, un señor de 73 años de edad que señaló que se adaptó por sugerencia de sus nietos.
Coincidieron en que llegar a sitios formales e informales preguntando precios los obligó a acostumbrarse, incluso en el caso de los servicios. Indicaron que de lo contrario los bienes serían inalcanzables.
El encargado de un comercio, que calcula sus montos en divisas, adujo que aplicaron esta medida para garantizar la reposición de la mercancía. Indicó que, de otro modo, el costo escaparía de sus posibilidades. “Ya esto es como un círculo vicioso. No nos queda de otra”.
Tiendas como Traki y Total ya han fijado libremente los precios de sus productos en moneda extranjera, aunque pueden ser cancelados en bolívares.
Milena Pérez / Barcelona
