Eduardo Escobar es uno de los beisbolistas venezolanos que están consolidados en las Grandes Ligas. Se alista para disputar su novena temporada, y primera completa con Cascabeles de Arizona, quienes aseguraron sus servicios por los próximos tres torneos.
Durante esas tres contiendas el infielder cobrará 21 millones de dólares, una cantidad que le asegura su futuro. Sin embargo, el dinero no hace que olvide su origen humilde.
Al menos eso demostró al comparecer el fin de semana ante representantes de los medios de comunicación estadounidenses durante el Festival del Fanático, organizado por la tropa desértica como parte de las actividades previas los Entrenamientos Primaverales 2019.
En ese diálogo con los periodistas, afirmó que es un “orgulloso hijo” del barrio La Pica, estado Aragua, donde nació hace 30 años.
“Soy un hombre de La Pica, allí nací y por eso uso el apodo de ‘El de La Pica’ para nunca olvidar que de allí vengo”, explicó Escobar a MLB.com.
Recordó que cuando competía en las ligas infantiles aragüeñas los habitantes de la populosa zona lo ayudaron a perfeccionar sus técnicas para batear y fildear. También le brindaron “calor de hogar”.
“En La Pica, hubo personas que me criaron. Allí mucha gente me ayudó cuando yo no era nadie en la vida y todo lo que soy, hoy día, se lo debo a ellos”.
Un apoyo constante
Escobar, quien puede custodiar la antesala, el campocorto y la intermedia, indicó que durante su niñez atravesó múltiples vicisitudes económicas. Gracias al apoyo de los vecinos de La Pica pudo alimentarse, para completar su desarrollo físico y mental.
“Esa gente de La Pica fue especial, porque me supo dar un plato de comida en momentos duros. Gracias a Dios, soy un pelotero de Grandes Ligas hoy día”.
Escobar, ficha de Tigres de Aragua en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (Lvbp), firmó autógrafos y obsequió camisetas durante la actividad en la que los peloteros interactuaron con los fanáticos. El evento se efectuó en el Salt River Fields de Scottsdale, Arizona, Estados Unidos.
Mientras estampaba rúbricas en pelotas, gorras, bates y franelas de las serpientes, comentó que durante el resto de su estancia en Las Mayores será un “eterno embajador de La Pica”.
“Tengo el honor y el orgullo de ser de ese barrio La Pica. Seré su representante por siempre, porque de allí vengo”.
Durante su carrera en el big show, el criollo promedia .257 después de sacudir 648 hits en 2.520 turnos. Acumula 153 dobles, 19 triples, 71 jonrones, 308 rayitas remolcadas y 310 anotadas.
Valencia / Joseph Ñambre
