El Palacio de Kensington anunció este lunes que el príncipe Enrique y su esposa Meghan, la duquesa de Sussex, esperan a su primogénito o primogénita para la primavera boreal de 2019.
A continuación algunas respuestas a las interrogantes sobre el futuro bebé de la familia real británica.
¿El bebé podrá ser rey o reina?
Es muy poco probable. El primogénito de Enrique y Meghan será séptimo en la línea de sucesión al trono cuando nazca el próximo año. Estará detrás de su abuelo, el príncipe Carlos; su tío Guillermo y sus primos Jorge, Carlota y Luis, además de su propio padre, el príncipe Enrique.
¿Será príncipe o princesa?
El bebé no se convertirá automáticamente en príncipe o princesa, aunque es posible que suceda si la reina Isabel II decide intervenir.
Los títulos fueron limitados por el rey Jorge V en 1917 de manera que excluye a los hijos de Enrique, pero la reina podría emprender alguna acción. El bebé tampoco recibirá el título de “su alteza real”.
Los hijos y nietos de la reina se convierten en príncipes y princesas, pero eso no aplica a sus bisnietos.
La única excepción, como lo expresó el rey en 1917, es para “el hijo mayor vivo del hijo mayor del príncipe de Gales”, en este caso el príncipe Jorge, el primer hijo nacido de Guillermo y Catalina, la duquesa de Cambridge.
La reina también puede intervenir si así lo elige, como lo hizo en el caso de los otros hijos de Guillermo, pero no está claro si lo hará en el caso de Enrique porque sus hijos estarán más lejos en la línea de sucesión.
¿Cuál será el título del bebé?
Si es niño será posiblemente conocido como conde de Dumbarton. Si es niña, como Lady Mountbatten-Windsor, con su primer nombre insertado después del título de lady. Como es poco probable que se convierta en monarca, Enrique y Meghan tendrán bastante libertad para elegir el primer nombre sin preocuparse mucho por la tradición real.
¿Qué ciudadanía tendrá?
El bebé tendrá la ciudadanía británica por su padre. Enrique y Meghan también podrán solicitar la ciudadanía estadounidense para el bebé, pues Meghan es estadounidense y vivió en su país el tiempo suficiente para que su hijo pueda recibir esa ciudadanía. Dependerá de lo que ellos quieran hacer.
Sería raro que un miembro de la realeza británica busque un pasaporte estadounidense, pero los dos países son aliados muy cercanos y hay tan buena voluntad con Meghan que una medida así no sería controversial.
La misma Meghan está en proceso de obtener la ciudadanía británica. No ha dicho si tiene planes de renunciar a su pasaporte estadounidense cuando se convierta en ciudadana británica, pero la ley de Gran Bretaña no exige que lo haga.
Londres / AP