El presidente de Chile, Gabriel Boric, anunció este jueves el envío de una nota de protesta a Venezuela por las declaraciones de su fiscal general, Tarek William Saab, que el miércoles señaló a los servicios de inteligencia chilenos como supuestos responsables del crimen del exmilitar Ronald Ojeda en febrero pasado en Santiago.
«Instruí al canciller presentar una nota de protesta (…) Chile es un país serio, donde las instituciones funcionan, donde hay separación de poderes, donde el Ministerio Público está llevando una investigación seria y responsable», indicó el mandatario progresista en declaraciones a los periodistas.
Boric dijo que «los comentarios del fiscal venezolano dan cuenta efectivamente de que no hay voluntad adecuada para resolver un caso que es tremendamente complejo» y aseguró que adoptará «todas las medidas que estén a nuestro alcance» para dar con los responsables del crimen.
«Cuando se insulta, se denigra o se pone en cuestión a las instituciones de nuestro país lo que tenemos que hacer es actuar con mucha claridad y firmeza», indicó el gobernante, que rechazó sin embargo la ruptura de relaciones diplomáticas.
Ojeda, disidente del Gobierno de Nicolás Maduro y asilado político en Chile, fue secuestrado el pasado 21 de febrero en Santiago y sus restos fueron hallados diez días después en una localidad periférica de la capital, sepultados debajo de un bloque de cemento.
La Fiscalía chilena vinculó en abril el crimen con la banda criminal Tren de Aragua, nacida en una cárcel venezolana y extendida por Chile, Perú, Colombia y Bolivia, y pidió apoyo a las autoridades venezolanas para esclarecer los hechos.
Hasta el momento, solo hay un joven venezolano detenido en Chile, pero hay otros dos sospechosos con órdenes de detención, que las autoridades chilenas creen que están en Venezuela.
El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, aseguró el miércoles que el crimen de Ojeda fue una operación para «enturbiar» las relaciones entre ambos países, en la que participaron cuerpos de inteligencia chilenos y extranjeros «con intereses espurios», al tiempo que rechazó que los dos sospechosos vayan a ser extraditados a Chile en caso de ser detenidos.
El caso lleva meses generando fricciones entre ambos países y acusaciones de falta de cooperación por parte de Chile hacia Venezuela.
Boric ya llamó a consultas el pasado 11 de abril a su embajador en Caracas, Jaime Gazmuri, que finalmente retomó sus funciones diplomáticas unos día después.
«Lo importante es que se sepa la verdad y que haya justicia. En eso yo completo plenamente en las instituciones chilenas», agregó Boric.
Santiago de Chile / EFE