Con la motivación de ayudar a familias vulnerables de la zona norte de Anzoátegui, el joven Roniel Ortiz emprendió la iniciativa Corazón de Oro, hace tres años.
En septiembre de 2018, el nativo de Barcelona empezó a visitar comunidades humildes para beneficiarlas con jornadas de alimentación y recreación, al tiempo de incentivar valores, educación, buenos hábitos.
“He estado enfocado en atacar el ocio y los antivalores, para evitar los vicios, la delincuencia y la falta de estudios entre la juventud”, contó Ortiz.
Además, se ha dedicado, en la medida de lo posible, a canalizar recursos para la donación de productos de higiene personal, insumos, medicinas y la realización de exámenes médicos a quienes lo necesitan y no cuentan con fuerza económica para costearlos.
Aunque no están contabilizadas las familias que han sido ayudadas a través de Corazón de Oro, Roniel Ortiz apuntó que son casi siete mil niños los beneficiados con las actividades desarrolladas en diferentes localidades.
FORMACIÓN Y TALENTO
Roniel Ortiz cursa el último semestre de Comunicación Social en la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV). Desde la adolescencia ha conducido varios programas radiales en el área metropolitana del estado y también ha animado eventos locales y nacionales. Además, posee su propia empresa de entretenimiento bajo el nombre de R Show Producción.
“Mi motivación es el amor hacia los demás (…) practicar los valores cristianos y ayudar a todos; pero, sobre todo, a quienes tienen mayores carencias”, dijo el chico de 27 años.
Las plataformas digitales le han servido al futuro comunicador, puesto que a través de ellas replica campañas de solidaridad de otras fundaciones o causas sociales y concretado colaboraciones para las actividades que lleva a cabo.
En 2012, este barcelonés empezó a formarse como recreador, de la mano de la Fundación Empresas Polar, la cual lo asesoró para tener su propio negocio y motivó a enseñar y ayudar a otros.
Al agravarse la crisis económica en el país y ver que la Polar tuvo que recortar los recursos destinados a los programas de formación, se sintió comprometido a seguir contribuyendo con las comunidades, pero desde su trinchera.
VISITAS
La iniciativa Corazón de Oro ha estado en comunidades como Naricual, Aragüita, Ojo de Agua I y II, Eneal y Viñedo. También ha visitado zonas de Margarita, Bolívar y Barinas.
A partir de ahí, tomó la decisión de utilizar sus ganancias, para concretar, poco a poco, Corazón de Oro, con la que busca “crear una sociedad más productiva”.
El camino, si bien ha sido una experiencia muy gratificante para él, también ha implicado desafíos, como sortear la crisis económica venezolana, la falta de gasolina y, por último, la pandemia de Covid-19.
Ninguna de estas adversas circunstancias ha mermado el ánimo de este joven filántropo, que sueña con tener una sede multifuncional de Corazón de Oro, para la formación, recreación y apoyo de las familias anzoatiguenses, así como lograr alcance nacional para sus actividades.
Barcelona / Andrea Aroca