El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, reiteró en rueda de prensa este 21 de diciembre lo que había expresado Joe Biden en un comunicado, respecto a que el gobierno de Nicolás Maduro había aceptado «ciertas propuestas» de cara a las elecciones de 2024.
En un comunicado de la Casa Blanca tras la liberación de diez presos políticos estadounidenses detenidos en Venezuela, el gobierno de Biden recalcó que se estaban asegurando «de que el régimen venezolano cumpla con sus compromisos».
«Han anunciado una hoja de ruta electoral, acordada por los partidos de la oposición, para unas elecciones presidenciales competitivas en 2024. Este es un paso adelante positivo e importante. Y hoy, están liberando a veinte presos políticos, además de los cinco liberados anteriormente. Continuaremos monitoreando esto de cerca y tomaremos las medidas apropiadas si es necesario», se leía en el texto.
A Kirby le preguntaron si en esas conversaciones se habló de permitir específicamente la participación de María Corina Machado en las presidenciales de 2024, a lo que respondió lo siguiente:
«No me involucraré demasiado en la conversaciones diplomáticas específicas que tuvimos. Lo que dijo el presidente (Biden) fue que el régimen Maduro sí aceptó incluir ciertas propuestas electorales y fueron apoyadas por partidos de oposición. Es importante que cumplan todos ellos», recalcó.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca dijo que el «trabajo» que la Administración de Joe Biden está haciendo con Venezuela es «importante para abordar las causas de raíz de la migración».
Kirby admitió además, a nombre de su gobierno, que EEUU liberó al empresario colombiano Alex Saab, estrecho colaborador de Nicolás Maduro y señalado como su testaferro, como parte de su estrategia para frenar la migración venezolana.
El funcionario agregó que «hay muchos factores» que explican el fenómeno migratorio y «uno de ellos es la inestabilidad política en la región».
Kirby explicó que el intercambio de prisioneros del miércoles y las negociaciones para la celebración de unas elecciones democráticas en Venezuela forman parte de los esfuerzos para reducir la migración.
El miércoles, EEUU excarceló a Saab a cambio de la liberación de 10 estadounidenses y una veintena de presos políticos venezolanos.
El canje se engloba en la mediación de EEUU en las negociaciones entre la oposición venezolana y el Gobierno de Maduro para lograr unas elecciones presidenciales «libre y justas» en 2024.
Devolver a Saab a Venezuela era una de las condiciones principales del Gobierno venezolano para seguir dialogando con el antichavismo.
La liberación de Saab ha sido duramente cuestionada por partidos de oposición venezolana y también por exfuncionarios del gobierno estadounidense, así como por los senadores Marco Rubio y Bob Menéndez.
La venezolana es la mayor crisis migratoria en el continente, obligando a más de 6,6 millones de personas a dejar sus hogares y vivir en otros países de América.
Este movimiento de personas sin precedentes ha llegado a EEUU y en el año fiscal 2023 las autoridades detuvieron a más de 200.000 venezolanos en la frontera con México.
En respuesta, la Administración demócrata ha tomado una serie de medidas dirigidas específicamente a este grupo, como retomar los vuelos de deportación a Venezuela en octubre de este año.
A la vez, ha creado canales de migración legal para los venezolanos, incluyendo el permiso humanitario, también conocido como «parole», que otorga un estatus legal por dos años en EEUU.
Caracas / Runrunes