Dadas las quejas de los propietarios de negocios, la Cámara de Comercio de Barcelona, por medio de su presidente Wael Raad, exhortó a las autoridades responsables de los servicios públicos en Anzoátegui a reunirse con el gremio, a fin de identificar los problemas que ocasionan las constantes interrupciones en la distribución de agua potable y de electricidad con miras a estudiar posibles soluciones.
Aseveró que los comerciantes de la capital anzoatiguense han mostrado preocupación porque las tarifas son bastante altas, pero el suministro del líquido potable y de luz son cada vez más malos.
En cuanto al recurso hídrico, Raad explicó que, aunque los pagos aumentaron al 3.000% en el mes de abril para el sector comercial, son pocas las horas que lo reciben en los establecimientos, una situación que se ha ido agravando con el paso de los días. Esto se repite en los condominios, acotó el gremialista.
“El sector comercio está padeciendo por las deficiencias del servicio, tanto como la población del estado Anzoátegui. Hay días en que el agua llega por solo una hora, pero los comerciantes igual deben pagar como si disfrutaran del servicio por 24 horas. Lo más grave es que los entes responsables no dan explicaciones sobre las fallas”, comentó.
También señaló que frecuentemente se registran cortes eléctricos que afectan las actividades comerciales diarias y que ponen en riesgo los equipos de trabajo de cada establecimiento.
Debido a esos problemas, Raad considera que la creación de una mesa técnica con la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe) y la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) sería la única vía para determinar el origen de estas deficiencias y cuáles pueden ser los proyectos para solucionarlas.
Aseveró que es necesario arreglar el problema para que todos los ciudadanos retomen el compromiso de pagarlos porque, según comentó, el sector comercio es el único que se ha visto obligado a seguir cancelando, pese a no estar satisfecho.
Barcelona / Milena Pérez