Julio Borges, vicepresidente de estrategia, comunicación y relaciones internacionales de Primero Justicia, señaló que en el año 2018 experimentó la coacción chavista que ahora se aplicó contra Edmundo González Urrutia, aspirante presidencial opositor, antes de salir al exilio a España.
«Viví en carne propia lo que es la coacción de los tres hermanos Rodríguez: Zapatero, Jorge y Delcy Rodríguez, cuando me negué a firmar el acuerdo fraudulento de República Dominicana», aseveró Borges este domingo 22 de septiembre a través de su cuenta en la red social X.
En ese sentido, el dirigente de PJ, que también está en España, destacó: «Esa misma presión fue la que le pusieron al presidente electo, Edmundo González Urrutia. No podrán contra más de 8 millones de Venezolanos que votaron por la libertad y la justicia».
Borges concedió una entrevista al diario español El Debate en la que sostuvo que fue perseguido la decisión de no firmar el acuerdo de Dominicana.
«Se desarrolló una represión sobre mi persona y mi equipo que no ha terminado. Hubo represión, coacción y amenazas de estos tres personajes (Jorge y Delcy Rodríguez, y Rodríguez Zapatero)», indicó.
Esgrimió que el objetivo del gobierno era lograr un acuerdo y legitimar a Maduro en 2018. Añadió: «Se les cayó el plan y para ellos fue literalmente como si el mundo se les derrumbara. Estaban muy desesperados. Llamaban a cada rato a Maduro para ver qué podían ofrecer».
También dijo: «Sin exagerar, en el caso de Zapatero juraba que se iba a ganar el premio Nobel de la Paz por ese acuerdo en Dominicana, que era un acuerdo mediocre, inaceptable y con el que retrocedíamos más bien kilómetros para poder tener elecciones medianamente justas».
Borges denunció que «Zapatero pasó de ser mediador a un gestor de los intereses de Maduro».
El dirigente opositor y expresidente de la Asamblea Nacional de 2015 refirió también la forma como se ha materializado la persecución del chavismo en su contra: «En mi caso me han venido cinco órdenes de cárcel. Me quitaron mi casa de Caracas, donde vivía con mi esposa y mis hijos, y gente de mi alrededor como Fernando Albán fueron asesinadas o las mandaron a la cárcel».
Caracas / TalCual
