El secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), José Bodas, aseguró que el incendio registrado este lunes en la Refinería de Puerto La Cruz, específicamente en la laguna de oxidación y tratamiento de agua, se pudo haber evitado.
"Si los pararrayos estuviesen en funcionamiento no hubiese pasado esto. Esta es una prueba contundente de que si están colocados no están funcionando, no se les hizo mantenimiento, o no están bien aterrados. Eso es lo que debe arrojar la investigación. Por ello el llamado es a las autoridades. Llovió y hubo una tormenta eléctrica, pero indudablemente que esto se pudo evitar. El sábado también ocurrió un incendio. Si bien es cierto que en ambos incidentes no hubo pérdidas humanas, estas estadísticas nos dicen que puede haber un accidente de mayor magnitud y eso es lo que no queremos", explicó.
El dirigente sindical aseguró que los comités de higiene y seguridad que hacen vida en la industria petrolera han presentado informes en los cuales exponen los diferentes problemas de dotación de uniformes y equipos que están padeciendo, pero no han sido escuchados.
"Los implementos de seguridad, botas, protección auditiva, guantes y uniformes es un punto fuerte. Pero también han planteado el problema con el sistema de salud. En lo que respecta a operaciones, siempre se ha expuesto la necesidad del mantenimiento que se debe hacer a las bombas, compresores, turbinas y sistemas contra incendios, a fin de que todo esté óptimo desde el punto de vista operacional. Todo esto lo establece la ley y la convención colectiva petrolera", acotó.
Por último, Bodas exigió a las autoridades de Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa) que habilite una unidad de caumatología en Anzoátegui.
"Es cierto que en estos dos eventos no hubo quemados, pero de haberse reportado alguno todos sabemos que la única clínica de caumatología del país se encuentra en el estado Zulia. Todos sabemos que en estas situaciones cada segundo cuenta", agregó.
Puerto La Cruz / Jesús Bermúdez
