Los negocios dedicados al lavado de vehículos han visto cómo su clientela ha mermado en los últimos meses, una situación que los dueños de estos locales atribuyen a la cuarentena y la escasez de gasolina.
El gerente de una de estos establecimientos, Edson Ruiz, informó que el negocio en el que tiene cinco años prestando servicio, ha decaído muchísimo, al extremo, de que semanalmente atiende uno o dos vehículos y, eso, porque según explicó, llama a los clientes para insistirles que vayan.
Ruiz dijo que trabaja porque tiene que seguir cancelando la facturación a la Hidrológica el Caribe (Hidrocaribe), así como los impuestos a la Alcaldía del municipio Sotillo.
“Ellos no han dejado de laborar, pero nosotros sí lo tenemos que hacer”, indicó el encargado un poco desanimado porque está pensando en entregar el local a su jefe.
El propietario, Robert Pérez, acotó que ciertamente las ventas han disminuido 90%, por lo que implementa ofertas con revisión gratis de fluidos y de la presión de cauchos, a fin de ganar clientes.
Pérez enfatizó que los químicos están muy costosos, ante lo cual ha optado por comprar lo esencial para que sus empleados trabajen en la semana.
Puerto La Cruz / Francismar Rivas / Pasante USM