La apendicitis consiste en la inflamación del apéndice cecal y no siempre presenta síntomas claros, por lo que en ocasiones se suele confundir con otras afecciones como las ginecológicas, retrasando así el diagnóstico real. Es por ello que muchas veces los pacientes se complican.
El médico general Júnior Rodríguez explicó que esta patología es de menor riesgo si se atiende en las primeras 24 horas.
“Para contribuir al diagnóstico clínico se recomienda no ingerir analgésicos como ibuprofeno, dipirona y diclofenac, ya que estos pueden disminuir la intensidad del dolor y crear confusión en la evaluación médica”, precisó.
La apendicitis es una de las enfermedades más comunes que afecta, aproximadamente, al 7% de la población. Aunque en las últimas décadas la incidencia de esta ha descendido, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Síntomas
El principal síntoma es dolor abdominal generalizado, que puede cursar con una molestia aguda en la esquina inferior derecha, además de náuseas, vómitos, fiebre, escalofríos, sudoración, hipotensión, pérdida de apetito y astenia. En casos avanzados se produce abdomen en tabla, es decir, endurecimiento.
Las causas más comunes son las obstructivas por alimentos de menor calibre, como las semillas, que colapsan la válvula cecal.
También se produce por parásitos, la cual es más frecuente en niños, mientras que la genética y la que ocurre por restos de heces que se acumulan en la válvula por la activación de fecalitos que inflaman el apéndice, se producen más que todo en personas que padecen de estreñimiento crónico.
Consecuencias
Rodríguez apuntó que cuando la apendicitis no se trata a tiempo puede tener como consecuencia el desarrollo de peritonitis, que ocurre porque se perfora el apéndice, y esto contribuye a la generación de absceso en la cavidad abdominal, condición que puede ser letal.
En los ancianos, la apendicitis aguda suele ser grave y con un alto riesgo de muerte.
En estos casos el tratamiento es netamente quirúrgico y con dosis de antibióticos. En la última década se ha desarrollado la apendicectomía, un procedimiento que se ejecuta a través de laparoscopia.
Según los especialistas, esta técnica genera poco dolor, ya que se realiza una menor incisión en la pared abdominal. Requiere hospitalización de dos días porque la recuperación es rápida.
1961
El médico ruso Leonid Rogozov se realizó una auto-apendicectomía. Estaba en una expedición en la Antártida y empezó a sentir un fuerte dolor abdominal y se dio cuenta de que tenía apendicitis. Al ser el único doctor en el lugar, se operó él mismo.
Puerto La Cruz / Anyeli Barceló
