El alto comisionado de las Naciones Unidas para los derechos humanos, Volker Türk, se mostró este lunes "profundamente preocupado" por el riesgo de un conflicto más amplio en Oriente Medio y pidió a todas las partes que actúen "urgentemente" para desescalar la situación.
El jefe de derechos humanos de la ONU hizo este llamamiento ante la creciente tensión en la región, cuando se espera una represalia de Irán tras un ataque atribuido a Israel en Teherán que acabó con la vida del líder político del grupo islamista palestino Hamás, Ismail Haniyeh.
"Hay que hacer todo, y me refiero a todo, para evitar que esta situación se precipite aún más en un abismo que sólo tendrá consecuencias aún más terribles para los civiles", afirmó Türk en un comunicado.
Estos civiles, recordó el alto comisionado, ya han padecido un "dolor y sufrimiento insoportables" a causa de las bombas y las armas en los últimos diez meses, especialmente las mujeres y los niños.
Por ello, instó a todos los países y, en concreto, a los Estados con influencia en el conflicto, a evitar esta potencial escalada para proteger a la población.
"Los derechos humanos, y en primer lugar la protección de los civiles, deben ser la máxima prioridad", recordó.
Ginebra / EFE
