El pasado lunes 19 de julio, el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) depositó a los adultos mayores la pensión correspondiente al mes de agosto, que equivale a Bs 7 millones. No obstante, los beneficiarios aseguran que es imposible vivir con ese monto y a muchos les toca “rebuscarse” para solventar, al menos la comida.
Y es que resulta complicado el mantenerse un mes entero con menos de dos dólares –que es aproximadamente lo que perciben- en una economía donde todos los precios de productos y servicios están basados en la moneda estadounidense.
En el caso de Eva Granados, barcelonesa de 75 años, la alternativa que tiene es la venta de helados caseros. La señora afirma que esta actividad la ha practicado desde hace mucho tiempo para ayudarse, pero se convirtió en su única fuente de ingresos constante desde que su pareja falleció hace unos meses.
“Yo quedé sola y debo buscar cómo resolver. No puedo confiarme de la pensión porque eso no alcanza para comer ni un día”, manifestó la señora, quien también recibe dinero de su hijo, quien vive en Caracas, aunque no con frecuencia.
Por su parte, José Brito, habitante de Puerto La Cruz, aseveró que para sobrellevar la situación se dedica a ofrecer servicio de limpieza de patios en las casas de Tierra Adentro, comunidad en la que reside.
“De vez en cuando también arreglo alguna que otra bicicleta y me ayudo con los bonos que me llegan”, expresó.
Zoraida Salazar, de 58 años de edad, indicó que para obtener más ingresos, vende productos como café, azúcar, sal, condimentos y otras cosas en pequeñas porciones. Admitió que la ayuda monetaria que le envían sus hijos es de gran provecho.
“Si no fuera por eso, quién sabe qué sería de mí. Es una burla a todo nuestro trabajo y esfuerzo de tantos años que la pensión apenas nos alcance para una harina de maíz y un pedazo de queso”, enfatizó.
Puerto La Cruz / Javier A. Guaipo