Las agencias de migración y refugiados de la ONU exhortaron este viernes al gobierno italiano a que permita el desembarco de 43 migrantes de Libia de un buque que los rescató en el mar Mediterráneo.
Roma no ha permitido que los migrantes a bordo del Sea Watch 3 bajen a la isla italiana de Lampedusa desde que fueron rescatados el 12 de junio.
El vocero de la Organización Internacional para las Migraciones, Joel Millman, dijo que la capital libia había “ofrecido su puerto a Sea Watch. El gobierno italiano dijo que deberían ir a Trípoli”.
El vocero de la Agencia de la ONU para los Refugiados, Babar Baloch, dijo que “Italia era responsable de permitir que estas personas desembarcaran” y agregó que “nadie debe ser regresado” a Libia, devastado por la guerra.
“Estas personas desesperadas deben desembarcar”, dijo Baloch. “Es una obligación bajo la ley internacional”.
Millman dijo que, durante la noche, equipos de la guardia costera italiana rescataron y llevaron a otras 80 personas a Lampedusa.
El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, dijo en referencia al buque con bandera holandesa que los migrantes “pueden ir a Holanda”.
Salvini dijo que los refugiados que escapan de las guerras son bienvenidos en Italia, pero que los migrantes que se dirigen a Europa por motivos económicos no tienen derecho a entrar.
Salvini, quien dirige el partido de extrema derecha antiinmigrante Liga, ha adoptado una medida severa contra la migración y se ha negado a abrir los puertos italianos a los buques de organizaciones no gubernamentales que han rescatado a migrantes en el Mediterráneo.
Ginebra / AP
