El directivo de la empresa Gas and Petroleum Services C.A (GPS, C.A), Oswaldo Mendoza, denunció que ha recibido amenazas contra su vida y la de familiares para que, supuestamente, desista de cobrar la deuda que mantienen con esta compañía por cinco meses de trabajo en la Faja Petrolífera del Orinoco (FPO).
Según contó, la intención de atemorizarlos no es nueva, pues afirmó que cuando realizaron manifestaciones en la sede de la compañía deudora, de allí llamaron a funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y los acusaron de alterar el orden público.
Sin embargo, haciendo uso de todos los soportes que tienen de los trabajos realizados, los afectados les mostraron la evidencia a los uniformados e hicieron constar que tenían una causa importante para reclamar.
En vista de que el episodio no pasó a mayores, durante los siguientes días, Mendoza aseguró que comenzó a recibir llamadas de individuos que se identificaban como "pranes de la región" y que lo conminaban a que"dejara la cobranza".
"Tengo la prueba de que me amenazaron con asesinar a mi mamá, así como al resto de directivos de GPS, lo cual es bastante grave", manifestó.
El empresario petrolero reiteró su preocupación ante lo que pueda sucederle, así como a sus familiares y socios, por lo que planea denunciar el caso ante el Ministerio Público.
Mendoza aseguró que el Estado ha cancelado los trabajos realizados a la mencionada compañía, pero esta se niega a saldar la deuda de 1 millón 900 mil dólares por concepto de cinco meses trabajados bajo una alianza firmada y notariada.
"Cabe destacar que junto a GPS, hay otras seis empresas en la misma situación, por lo que esperamos que las autoridades nacionales tomen cartas en el asunto", señaló.
Barcelona / Javier A. Guaipo